Ayudan once mil elementos del Ejército a la Policía a reforzar la seguridad.
EFE
GUATEMALA, GUATEMALA.- El presidente de Guatemala, Óscar Berger, ordenó ayer al Ejército sacar a las calles a 11 mil soldados para ayudar a la Policía a brindar seguridad a la población, ante los imparables índices de violencia que afectan al país.
?Vamos a tener presencia donde se requiera, tenemos plenamente identificados los lugares y en este momento vamos a llegar a tener casi 11 mil soldados?, precisó el mandatario a la prensa.
La decisión de Berger se anuncia un día después de que ordenara a los militares auxiliar a la Policía en la comunidad de Palín, a unos 50 kilómetros al sur de la capital, en donde los habitantes amenazaron con hacer justicia por su mano al no recibir protección ante la violencia de las pandillas conocidas como maras.
El pasado martes, miles de habitantes de esa población se organizaron y detuvieron a dos hombres y una mujer a los que acusaban de formar parte de una banda que se dedica a asaltar autobuses y comercios del lugar.
Los enfurecidos ciudadanos incendiaron tres casas en donde supuestamente vivían integrantes de la temida ?Mara Salvatrucha?, y amenazaron con linchar a los pandilleros que vean en sus calles.
Los militares, indicó el gobernante, serán coordinados por el Ministerio de la Defensa y estarán bajo las órdenes del Ministerio de Gobernación (Interior), ya que el objetivo es colaborar con la Policía Nacional Civil (PNC).
El portavoz del Ejército, coronel Jorge Ortega, explicó que los primeros lugares a donde serán enviados los militares para colaborar con la PNC son los departamentos de Petén (norte), Zacapa y Jutiapa (este) y Huehuetenango (noroeste), ?y el principal esfuerzo militar será en la capital y sus municipios aledaños?.
Desde el pasado seis de abril un comando militar de dos mil 400 ex soldados, que integran seis escuadrones, se unió a la PNC para hacer frente a los grupos del crimen organizado y las pandillas que atemorizan a la población.
