El Siglo de Durango
Minimiza Javier Covarrubias Vázquez el problema de la contaminación por parte del transporte público ya que, desde su perspectiva, sólo el 6 por ciento de su parque tiene este problema. Del retiro de unidades por parte de la DGTE dice que no lo reprueban, pues están conscientes de que hay vehículos que ya no pueden circular.
El líder choferil de la CTM en Durango reconoce que la contaminación emitida por las unidades de transporte público es por la irresponsabilidad de los propietarios, quienes no les dan el mantenimiento correcto y después resulta muy caro arreglarlas.
El Secretario General del Sindicato de Choferes de la Confederación de Trabajadores de México acepta las medidas efectuadas por la Dirección General de Transportes del Estado (DGTE), ya que, afirma, se percató de la necesidad de cambiar las unidades desde el año pasado.
?Para poder pedir una tarifa y que ésta sea autorizada, lo primero que nos piden es la imagen del vehículo, que no contamine, que traiga su pintura adecuada, pisos y vidrios. Lo más difícil es la contaminación, difícil por el hecho de que para poder quitarle ese defecto a la unidad o se tiene que reparar la máquina o llevarla a la afinación para que no eche humo?, platica.
?Para el chequeo de la contaminación les quitan la bomba de inyección, la afinan, le ponen algunas partes y deja de aventar la humareda siempre y cuando la bomba esté en condiciones. Es caro, son unos 18 ó 20 mil pesos la reparación?, asevera.
?Es parte de la irresponsabilidad del conductor o del dueño de la unidad no estarle dando su mantenimiento necesario como debe ser, afloran los daños y avientan humaredas de la noche a la mañana, pero si constantemente se checan las bombas de inyección pues tiene que durar más tiempo. Todo depende del operador o del dueño de la unidad?, expresa.
?A mí me han retirado tres unidades que están ahorita en el taller para hacerles lo que se determinó en el acta que se levantó, carrocerías, vidrios. Lo que vamos a hacer es reestructurarlos?, especifica.
Y es que, dice, con los precios actuales de las unidades pocos son los que pueden adquirir vehículos nuevos. ?¿Con lo que nos dieron con qué los pagamos?, yo calculo que un 6 ó 7 por ciento de las unidades incumple con la norma, ojalá y hubiera la cultura necesaria para entender la combustión de una máquina, hay operadores que no colaboran con nosotros?, ilustra.
Covarrubias Vázquez afirma que por parte del sindicato no aplican sanción alguna a los que contaminan, ya que, dice, ?no pueden ser juez y parte?; sin embargo, sí colaboran con la autoridad.
?No tenemos por qué reclamar, hay unos que hacen bocanadas de humo?, asiente el líder sindical, quien testifica que es un porcentaje pequeño de unidades que tiene este problema de humos contaminantes.
Sigue la supervisión
La Dirección General de Transportes del Estado de Durango (DGTE) sacó de circulación dos unidades más, en esta ocasión, de la ruta Zapata-Guadalupe Victoria.
Después de una supervisión de las unidades practicada hace algunos días, ayer se venció el plazo para que aquellos que resultaron con actas administrativas cumplieran con el arreglo de sus camiones. Ricardo Ochoa, jefe de inspectores de la DGTE, comunicó que la mayoría de los sancionados atendieron sus observaciones, a excepción de dos.
Comentó que en total se levantaron 18 actas en dicha ruta y que hasta el momento siete unidades se encuentran en el taller reparándoles los aspectos señalados por los inspectores.
Este día, le toca el turno a la ruta Insurgentes, a la cual también ya se le había practicado una supervisión por parte de la DGTE y en total se les levantaron 14 actas; sin embargo, hoy se definirá cuántas salen de circulación por las malas condiciones en las que se encuentran y ante el caso omiso de los propietarios de repararlas.
