Al menos nueve personas murieron y 34 más resultaron heridas en Ciudad Sadr, y en Azamiya, por el impacto de varios proyectiles de mortero.
EFE/AP
Bagdad.- El primer ministro de Irak, Nuri al Maliki, afirmó hoy que su Gobierno no desistirá en el cumplimiento de la pena de muerte dictada por la justicia contra el derrocado presidente Saddam Hussein.
"No renunciaremos en lo más mínimo respecto al cumplimiento de la sentencia de muerte contra el tirano Saddam, pese a las amenazas de algunos de que esa ejecución desencadenará una guerra civil en Irak", recalcó Maliki al recibir a familiares de algunas personas que fueron ejecutadas durante el régimen del dictador.
En la reunión, el jefe del Gobierno se comprometió, mientras permanezca en el puesto, a no permitir que miembros del antiguo partido gobernante Al Baaz, que lideraba Saddam, ocupen cargos estatales.
Asimismo, Maliki acusó a los ex integrantes de esa formación política de financiar los ataques armados que se perpetran en diferentes zonas de Irak.
Saddam Hussein fue condenado el domingo a morir en la horca por "crímenes contra la humanidad" por su implicación en la muerte de 148 shiies en la aldea de Duyail, al norte de Bagdad, en 1982.
El depuesto mandatario iraquí afronta también el juicio por el caso de Al Anfal, que hoy fue pospuesto para el próximo 27 de noviembre.
Ataque con proyectiles
Al menos nueve personas murieron y 34 más resultaron heridas hoy en Ciudad Sadr, un barrio de mayoría shii al este de Bagdad, y en Azamiya, de mayoría suní en el norte de la capital, por el impacto de varios proyectiles de mortero.
Según informaron fuentes del Ministerio iraquí del Interior, el impacto de varios proyectiles en Ciudad Sadr acabó con la vida de ocho personas e hirió a 29, mientras que una persona murió y 5 resultaron heridas en Azamiya.
Las fuentes, que hasta ahora no han proporcionado más detalles de esos dos ataques, se limitaron en afirmar que las fuerzas de seguridad acordonaron las zonas para facilitar las labores de traslado de los cadáveres y los heridos a los hospitales.
Estos atentados se producen pocas horas después de que al menos ocho iraquíes perdiesen la vida y otros 48 resultasen heridos en una serie de atentados con coches bomba y proyectiles de mortero en distintas partes de Bagdad.
Mueren miemebros de Al Qaeda
Fuerzas de la coalición militar desplegada en Irak acabaron hoy con la vida de diez presuntos miembros de la organización terrorista Al Qaeda en la localidad de Muqdadiya, 90 kilómetros al noreste de Bagdad, donde liberaron a un policía iraquí que estaba secuestrado.
Según un comunicado del mando castrense, las tropas de la coalición lanzaron una redada en la citada localidad, donde se enfrentaron "con diez terroristas que portaban (ametralladoras) AK-47, un lanzagranadas y una ametralladora pesada".
En el interior de un edificio de Muqdadiya encontraron a un rehén "con los ojos vendados y atado" que explicó que era un policía iraquí secuestrado hace seis días junto a dos compañeros, que fueron liberados por sus captores.
