La primavera empieza en marzo, y sin embargo abril es un mes más primaveral.
En efecto, para indicar que una muchachita tiene 15 primaveras decimos que tiene 15 abriles, y no que tiene 15 marzos.
Es en abril cuando los árboles más sabios de mi huerto, los nogales, dejan por fin salir sus brotes nuevos. Es en abril cuando el zenzontle llega a cantar en la flama más alta del ciprés. (No escribí "rama"; puse "flama", porque el ciprés parece la llama de una vela pintada por El Greco). También es en abril cuando florece esta pequeña flor efímera que las mujeres del Potrero llaman "amor de un rato", sin pensar que todos los amores, aunque duren toda la vida, son amor de un rato.
Por eso, porque es amor de un rato, hay que gozar del amor con plenitud. Por eso, porque es abril de un rato, hay que gozar plenamente este primaveral abril.
¡Hasta mañana!..