Hay en el cementerio de Abrego una tumba. Si pudiéramos escuchar las voces de las tumbas esto es lo que oiríamos en ésa:
"... Siempre quise más tierra. Avaro de terrones fui. Con nada me conformaba; ambicioné cada día una extensión mayor. Me apoderaba de la heredad de mis vecinos; arrebaté lo suyo a mis hermanos; quería poseer todas las tierras; quería poseer toda la tierra.
"... Se llegó el día de mi muerte y supe que en vez de buscar más tierra debí buscar más cielo. Porque ahora que tengo toda la tierra que necesitaba sé que realmente no necesitaba mucha...?.
Hay en el cementerio de Abrego una tumba. Parece grande, pero es tan pequeña como todas las tumbas del mundo.
¡Hasta mañana!..