Bogotá, (EFE).- Un niño de dos años murió tras haber sido introducido en el vientre de una vaca sacrificada, una práctica a la que una creencia popular atribuye propiedades curativas, informaron medios periodísticos de Bogotá.
El niño "presentó problemas respiratorios y falleció" pocos minutos después de haber sido introducido en el vientre del animal, en el matadero municipal de Palermo, localidad a 320 kilómetros de Bogotá, según una versión divulgada por la cadena Caracol Radio.
La radio explicó que los padres son "dos jóvenes esposos" que apelaron a creencias populares para buscar que su hijo pudiera superar "deficiencias" que tenía en las piernas y que "le impedían caminar".
Las restricciones al ingreso en el matadero de Neiva, que es la capital departamental del Huila, llevaron a la pareja a desplazarse a Palermo, donde los funcionarios del establecimiento local les facilitaron el acceso.
Los responsables de la seguridad del matadero serán destituidos, dijo la radio, que indicó que en el cadáver del niño fue trasladado al hospital municipal, donde los médicos establecieron que el menor presentaba un "grave cuadro de desnutrición".