Se pierden millones de pesos por juicios entre herederos o problemas de desintegración familiar.
EL UNIVERSAL-AEE
Nezahualcóyotl, ESTADO DE MÉXICO. En México ocho de cada diez adultos en promedio mueren sin dejar testamento, motivo por el cual se pierden millones de pesos por juicios entre herederos o problemas de desintegración familiar por la disputa de los bienes.
Afirmó lo anterior el diputado local electo, Carlos Alberto Pérez Cuevas, durante la entrega de un paquete de testamentos de los más de siete mil gestionados durante los últimos tres años en beneficio de habitantes de Nezahualcóyotl y otros municipios.
Refirió que las miles de familias beneficiadas con este trámite, son producto de gestiones, donde los testamentarios no tienen que pagar más que 650 pesos para la documentación.
Dicha cantidad, dijo, si tuvieran que pagarla los interesados con abogados particulares, podrían tener un costo normal de hasta cuatro mil pesos.
Suma que no se compara a los 60 mil pesos que puede costar un juicio cuando no existe un testamento y los familiares se disputan la herencia, sin contar la pérdida de tiempo en asistir a audiencias.
Alberto Pérez aseguró que en México aún no existe una cultura de la prevención, sobre todo en este sentido, pues si la gente difícilmente previene su muerte con la adquisición de una perpetuidad, menos se preocupan por repartir sus propiedades entre sus seres queridos.
El equipo de abogados que participa en este programa testamental, asesora completamente gratis a los interesados, quienes incluso tienen la opción de poder acudir con el notario o abogado de su preferencia para realizar el trámite, luego de la asesoría. Un problema común por el que los adultos no dejan testamento, dijo el servidor público, es porque siempre piensan que sus hijos o herederos no van a pelear ningún bien o los van a compartir.
Sin embargo en la realidad, dijo, hay muchos casos de desintegración familiar por la disputa de la herencia, que en situaciones graves, han terminado con la muerte de algún familiar o heredero por enfrentamiento.
