DURA LUCHA| LA ESCUADRA "AZZURRA" TIENE TRES RIVALES MUY INCÓMODOS.
La selección italiana llega a la Copa del Mundo en calidad de invicta durante la clasificación.
TORREÓN, COAH.- El Grupo E será una auténtica guerra sin cuartel, donde los cuatro conjuntos involucrados no salieron nada satisfechos luego del sorteo realizado en diciembre pasado, al considerarlo un pelotón de la muerte.
Como cabeza de grupo está Italia, seguida de uno de los rivales europeos más incómodos y con gran futuro en inmediatas competiciones como la República Checa, además de la debutante Ghana y los siempre constantes de Estados Unidos.
La selección italiana dirigida por un Marcello Lippi, se mantuvo invicta en 2005, lo que habla del gran equilibrio que tiene entre sus líneas, a pesar de que no contarán en Alemania con su implacable goleador Cristian Vieri.
Es un equipo bien armado que pone la calidad individual al servicio del bloque, el cual bien se puede decir que es superior al exhibido en los últimos mundiales y eurocopas por los equipos participantes.
Y es que Italia, tres veces campeona mundial pero que no saborea las mieles del triunfo final desde España 1982, irá a tierras teutonas deseando tomarse la revancha de dos mundiales (Francia ?98 y Japón-Corea 2002) y dos eurocopas (Bélgica-Holanda 2000 y Portugal 2004) en las que decepcionó.
En ellas la ?azzurra? partía en el grupo de favoritos y de ellas se fue en medio de críticas, desilusiones y malas sensaciones. Tanto que, prácticamente, jubiló a técnicos como Dino Zoff y Giovanni Trapattoni, dos ?viejos zorros? que se estrellaron como seleccionadores.
En la búsqueda por recuperar ese prestigio internacional, Lippi se apoya en un esquema 4-3-1-2, que como buena tradicional transalpina, se basa en una gran fortaleza defensiva, mejor conocido como ?catenaccio? (candado en italiano).
Una contención admirable y envidiada, que se inicia con el arquero Gianluigi Buffon y se extiende con Fabio Cannavaro y Alessandro Nesta como grandes jefes centrales y la última novedad, de desplazar a Gianluca Zambrotta en la lateral derecha para ubicar en la izquierda a Fabio Grosso, una de las revelaciones de los últimos meses.
Italia además conjuga su excelente defensa con un centro del campo dirigido por el orden y la fantasía de Andrea Pirlo, donde la fuerza la pone Gennaro Gattuso, tan tosco como insustituible en su infatigable misión de correr durante los 90 minutos.
Por delante está el romano Francesco Totti, por detrás de unos puntas Luca Toni y Alberto Gilardino que representan una temible explosiva delantera peligrosa. También tiene excelentes reservas en el banco como Oddo, Materazzi, De Rossi, Iaquinta, Filippo Inzaghi y Alessandro del Piero.
Checos quieren recuperar su prestigio
La República Checa, sucesora de la antigua y poderosa Checoslovaquia, vuelve al campeonato del mundo tras un largo paréntesis de 16 años, pero con un equipo capaz de convertirse en protagonista en Alemania.
El conjunto de Karel Bruckner era una de las grandes ?amenazas? del segundo bombo, ya que pese a llegar a tierras germanas por medio de la repesca, tras quedar en su grupo por detrás de Holanda, actual posición en la clasificación FIFA, segundo tras Brasil, habla bien claro de su potencia.
La selección checa fue uno de los equipos que mejor futbol practicó en la Eurocopa de Portugal 2004 y cuenta con varios de los mejores jugadores del continente. Liderado por Pavel Nedved, (Balón de Oro 2003), que regresó al conjunto para ayudarle a clasificarse, esta escuadra también tiene a uno de los mejores guardametas del mundo, el arquero del Chelsea, Petr Cech.
Tomas Rosicky, media punta con buena visión de juego y Milan Baros, ex delantero del Liverpool, ahora en el Aston Villa, son otros de los valores del equipo centroeuropeo.
Campeón de Europa en 1976, finalista en la Eurocopa de Inglaterra ?96 y tercero en la Eurocopa de Portugal 2004, el conjunto checo vuelve al Mundial después más de tres lustros. Será su novena fase final, si se considera heredera de Checoslovaquia. De las otras ocho presencias, destacan las dos finales que jugó y perdió contra Italia en 1934 y Brasil en Chile ?62.
El retorno de Nedved a la selección, que se produjo con ocasión de la repesca contra Noruega, estuvo precedido de una gran cantidad de rumores sobre si ponía fin o no a su trayectoria internacional y que enturbiaron incluso las relaciones del jugador con la prensa.
Tras sufrir una lesión de rodilla en la última Eurocopa, Nedved anunció su retirada del equipo, consternado también por la campaña en su contra sufrida en los medios de comunicación. El centrocampista afirmó entonces que, dado su frágil estado físico, quería concentrarse en la exigente liga italiana.
Ghana tiene un largo camino recorrido
La selección de Ghana, potencia mundial en las categorías inferiores, se estrenará en Alemania como debutante en la fase final de un mundial, tras liderar con autoridad su grupo clasificatorio de África.
Este equipo ha sido históricamente un conjunto que ha brillado con luz propia en las competiciones infantiles y juveniles, contando en su haber con un doble campeonato mundial Sub 17, prueba del valor de sus jugadores jóvenes, que hasta la fecha no había cristalizado en la categoría absoluta.
Además, la selección ghanesa cuenta en sus vitrinas con cuatro Copas de África, aunque la última data de 1982, lo que refleja la travesía del desierto que ha sufrido el futbol de este país centroafricano poblado por más de 20 millones de personas.
A pesar de la sequía de resultados en los últimos tiempos, las ?estrellas negras? han exportado últimamente a numerosos talentos que han brillado en el futbol europeo, tales como Abedí Pelé, Ben Acheampong, Anthony Yeboah y más recientemente el central Samuel Kuffour.
La gran estrella de Ghana ahora, sin embargo, es Michael Essien, actual jugador del Chelsea y que protagonizó uno de los traspasos más sonados al recalar en Stamford Bridge procedente del Olympique de Lyon, por 40 millones de euros, lo que le convierte en el jugador africano más caro de la historia.
Essien es un mediocampista trabajador, con gran sentido táctico, buen disparo de media distancia y una pieza vital para el engranaje no sólo del equipo nacional, sino del poderoso bicampeón de la Premier League.
Junto al jugador del Chelsea, el capitán Stephen Appiah comparte los galones del equipo. Appiah es del mismo corte que Essien, que resulta un buen complemento de éste y que convierte al centro del campo ghanés en la franja con más calidad del equipo.
Otros jugadores que puedan brillar en Alemania son Sulley Muntari, jugador del Udinese que suele jugar por la banda derecha y que suele marcar goles con cierta frecuencia, así como el delantero Asamoah Gyan.
Estados Unidos va por la consolidación
La selección de Estados Unidos vuelve por quinta vez consecutiva a una Copa Mundial y su objetivo en Alemania no será otro que superar la gran actuación que tuvo en Corea y Japón, cuando llegó a los cuartos de final.
El nuevo reto para el futbol de la selección de la barras y las estrellas, es demostrar que lo que sucedió en Corea-Japón no fue producto de la casualidad o la suerte, sino que cuentan con uno de los equipos más jóvenes y de mayor experiencia internacional que van a participar en la justa.
Además tienen también la cuenta pendiente de la derrota por 1-0 que sufrieron ante Alemania, en el partido que les impidió llegar a las semifinales en la cita mundialista de 2002, en un partido en el que se quejaron de la actuación arbitral.
Jugarán el octavo mundial de su historia, desde que participó en el primero de 1930, en Uruguay, cuando formó parte de los 13 equipos que inauguraron la competición y su delantero Bert Patenaude, se convirtió en el tercer máximo goleador y primero que marcó tres tantos en un Mundial.
El futbol en Estados Unidos sigue siendo un deporte menor dentro del profesionalismo, pero la evolución de su selección ha sido progresiva y permanente para convertirla en la más potente que hay dentro del área de la Confederación del Norte, Centroamérica y del Caribe de Futbol Asociación (Concacaf) junto con México.
Estados Unidos alcanzó sin ningún problema la clasificación para el Mundial de Alemania al quedar primero del torneo hexagonal de la Concacaf junto con México, que ha visto cómo su hegemonía en la región se diluyó ante la evolución del futbol en su país vecino del Norte.
La cada vez mayor presencia de jugadores estadounidenses en las ligas europeas le han dado a su selección una base poderosa que mezcla a la perfección juventud, preparación y experiencia internacional, algo de lo que carece el futbol de la mayoría de los países de la región, incluido México, que es importador de futbolistas y no exportador.
Arena ya ha reconocido que para la cita de Alemania 2006 entre los seleccionadas habrá de 12 a 14 jugadores que militan en el futbol europeo. Mientras que el resto saldrán de los equipos de la Liga Mayor de Soccer (MLS, por sus siglas en inglés), que sigue sin dar el salto cualitativo para convertirse en verdadera atracción para los aficionados, pero que va generando nuevo talento de gran ayuda al combinado nacional.
Aunque ya han surgido nuevos valores como DaMarcus Beasley, Conor Casey y Santino Quaranta de nuevo las grandes figuras dentro del equipo serán los delanteros Landon Donovan y Brian McBride, junto con el volante Claudio Reyna.