En la cancha o en una sala de juntas este tipo de contusiones provoca dolor agudo y si no se atiende provoca daños permanentes.
EL UNIVERSAL-AEE
Es cierto que cuando se ve a un jugador sufrir una lesión, resulta imposible no hacer una mueca de dolor, pues se sabe que sin ser un gran futbolista o un atleta de alto rendimiento todo mundo está expuesto a sufrir algo similar, incluso en la
supuesta tranquilidad de la casa.
Resulta que, según el doctor Oswaldo Ballinas Ordóñez, especialista en medicina del deporte, algunos de los casos que se ven en juegos de la Copa del Mundo "no son muy diferentes a aquellos que llegan cotidianamente a los consultorios médicos, cuando el paciente se propone realizar una actividad saludable y termina provocando una lesión a su sistema músculo-esquelético".
En la cancha o en una sala de juntas este tipo de contusiones provoca dolor agudo, que se siente de manera intensa, pero momentánea, pero si no se atiende provoca daños permanentes, que se registran como dolor crónico, el cual persiste semanas, meses o años.
Los médicos coinciden en que muchos deportistas se exponen a estas lesiones por no estar en forma ni tomar en cuenta la resistencia de su cuerpo.
El doctor Ballinas Ordóñez sostiene que "los deportistas pueden sufrir daños en sus músculos y huesos por dos causas principales: falta de acondicionamiento y un sobre esfuerzo de sus capacidades".
Estos riesgos se dan en todos los deportes, sobre los cuales dice: "Se componen de dos partes: la técnica, que es la que nos enseña cómo agarrar una raqueta o patear un balón, y el acondicionamiento físico, que es el que va preparando a los
músculos para realmente dar y recibir los beneficios del ejercicio".
Llama la atención sobre que "casi todos nos enfocamos en trabajar en la técnica, pero poco se hace por el acondicionamiento".
Y con el ojo puesto en el Mundial, menciona que "en el caso de los futbolistas, las lesiones más comunes son las metabólicas como distensiones y desgarramientos musculares, y las mecánicas como las lesiones de las articulaciones (meniscos, ligamentos, etcétera) y las fracturas".
Mientras que entre los corredores, las más frecuentes son provocadas por lesiones en la planta del pie, en segundo lugar llegan muchos casos de daños en tobillo por usar calzado inadecuado y en tercer término se encuentran las afectaciones en los músculos del peroné, tibia y gemelos.
En México, recientemente se han comenzado a emplear las terapias combinadas, medicamentos que en una sola dosis contienen un desinflamatorio y un relajante muscular, como es el caso de la unión de meloxicam (antiinflamatorio no esteroideo) y carisoprodol (relajante muscular), conocida como Dorsal.
Ballinas Ordóñez señala que "estudios clínicos han demostrado que con el uso de esta nueva combinación, los pacientes en un periodo no mayor a 30 minutos, recuperan su funcionalidad física, les reduce el dolor y la inflamación de las lesiones músculo-esqueléticas, aumentando la flexibilidad de músculos, ligamentos, terminales músculo-tendinosas, y articulaciones de la zona, con una duración de acción y un perfil de seguridad y eficacia importante".
El especialista, que es jefe de Cirugía Articular del Hospital "Germán Díaz Lombardo", menciona que además existe la "ventaja que los pacientes tienen un mayor apego al tratamiento, debido a que sólo tienen que tomar una dosis al día, pues es común que al dejar de sentir el dolor se abandone la terapia".
