La cuenta regresiva terminó. Finalmente inició el Mundial de Futbol con un triunfo de Alemania sobre Costa Rica. Durante un mes los ojos del mundo estarán al pendiente de quién se alza como campeón. El gran favorito es, como siempre, Brasil.
El futbol es el deporte más popular del mundo, vaya, la FIFA tiene más países agremiados que la Organización de las Naciones Unidas. Las expectativas de que México llegue a una siguiente ronda son muchas, de ahí la competencia de las televisoras por acaparar el rating, así como el desborde de publicidad que por momentos nos hace olvidar que finalmente el futbol no es más que un deporte. La danza de los millones secuestra el espíritu lúdico del juego.
El Mundial de Alemania 2006 se presenta en una coyuntura especial para nuestro país, ya que la máxima fiesta del futbol inicia a menos de un mes que se realicen las elecciones para elegir presidente de la República. Es necesario no perder de vista el comportamiento que tendrán en los siguientes días los candidatos y seguir analizando sus propuestas, finalmente como sociedad estamos obligados a no dejar de lado los temas importantes.
La alegría que puede darnos como nación los triunfos que obtenga el equipo dirigido por La Volpe hay que disfrutarla al máximo, sin embargo, la euforia no debe desviar nuestra atención del proceso electoral a celebrarse el próximo dos de julio. No debemos perdernos en espejismos futbolísticos cuando estamos por acudir a las urnas para elegir a la persona que guiará los destinos de nuestro país los próximos seis años, ése es el reto y un ingrediente más para disfrutar la máxima fiesta del futbol.
