La historia de Jaime Rodríguez, vocal secretario del IFE, es similar a la de millones de mexicanos que participaron en el proceso electoral del dos de julio. Como parte de su misión, el pasado miércoles Jaime estuvo 25 horas sin dormir cantando los resultados de las actas, apoyando al presidente del consejo distrital 05 de Torreón.
Jaime tiene 28 años y es abogado, no puede evitar fruncir el ceño cuando escucha que el PRD descalifica la elección. Para Jaime trabajar en la construcción de la democracia del país es un orgullo, de ahí que le moleste los comentarios que aseguran que hubo fraude en el proceso electoral. El discurso de Andrés Manuel López Obrador tras la derrota, donde denuncia irregularidades, indigna a un ejército de personas que el pasado domingo sacrificaron muchas cosas para estar vigilando el desarrollo de las elecciones en 130 mil casillas que instaló el IFE en todo el país.
El PRD tiene derecho a impugnar la elección, eso no está a discusión, lo que no se vale es dar de hachazos a las instituciones, particularmente al IFE, donde la participación ciudadana es un garante de imparcialidad. Los resultados finales arrojados tras la revisión de las boletas de los 300 consejos distritales, fueron muy similares a los dados a conocer el domingo en el Programa de Resultados Preliminares.
Según el conteo final Felipe Calderón se alzó con la victoria con 15 millones 284 sufragios (en México y desde el extranjero), equivalente a 35.89 por ciento de la votación total, mientras que López Obrador obtuvo 14 millones 756 mil 350, equivalente al 35.31 por ciento. La diferencia entre ambos contendientes fue mínima, apenas del 0.58 por ciento. En el PREP también el PAN se alzaba con la victoria y la diferencia en este programa fue del uno por ciento.
Sería una lástima para la vida política del país que el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador termine en movilizaciones que poco aportan a la democracia. Las denuncias deben tener un cauce legal, se vale recurrir al Tribunal Electoral, pero no sacar los machetes en busca de un triunfo que en las urnas no se dio.
