Los resultados definitivos del segundo Conteo de Población y Vivienda arrojaron que en el cuarto trimestre de 2005, la población de México ascendió a 103 millones 263 mil 388 personas, según el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
Este resultado fue menor en 3.2 millones de habitantes respecto de las estimaciones del Consejo Nacional de Población para 2005, e inferior en casi 2.7 millones de personas en relación con las proyecciones del propio INEGI.
Aun así, entre 2000 y 2005, el número de habitantes de la República Mexicana aumentó en 5.8 millones de personas, desde una población de 97.5 millones que había al inicio del Gobierno del presidente Vicente Fox Quesada, en cuya Administración cada año salieron al menos 400 mil mexicanos al exterior en busca de las oportunidades que no encontraron en el país.
Los resultados del segundo Conteo de Población y Vivienda son lo más cercano a la realidad que se dispone para medir las condiciones demográficas y sociales de los habitantes en México. Situación que debe ser tomada en cuenta por los candidatos a la Presidencia de México.
Sus propuestas deben orientarse en garantizar un adecuado abasto de agua, de servicios básicos; una adecuada cobertura de servicios de salud y de educación; pero sobre todo la generación de empleos, para mejorar las condiciones de vida de los 103 millones de mexicanos que somos actualmente.
Es indispensable que los presidenciables dejen de enrarecer el clima electoral que vive el país y orienten sus esfuerzos en diseñar programas que garanticen una vida digna y de mejor calidad para los ciudadanos que acudirán el próximo dos de julio a las urnas.