Para igualar costos del tabique el Municipio debe reubicar a los obrajeros que faltan: CIC
El Siglo de Durango
Para garantizar que el producto del Parque Industrial Ladrillero sea consumido, la autoridad debe actuar para hacer que todos los obrajeros se instalen en ese lugar, ya que, de no ser así, el precio será diferenciado y, por lo tanto, los constructores optarán por comprar el más barato, es decir, el que se produce en la mancha urbana.
Ésa es la perspectiva de Gabriel Montes Casas, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles (CIC), quien explica que, aunque fue loable la intención de la autoridad municipal de buscar un lugar apropiado para la cocción del ladrillo y así combatir los problemas de contaminación, la verdad es que la nueva ubicación está muy alejada, y eso ya no se puede remediar.
Platica que en otras ciudades del país, el ladrillo prácticamente ya no se utiliza en las edificaciones ya que en estos momentos se construyen las denominadas casas Mecano, que tienen paredes de concreto o bloques, situación que también llegará a la entidad federativa.
Sin embargo, como en Durango aún es materia prima, los constructores buscan los precios más accesibles, y por lo tanto, prefieren comprarlo a 75 centavos que a un peso.
Acepta que los constructores, por lo tanto, no consumen el ladrillo del Parque Industrial pues sus presupuestos no son ?tan boyantes?, así que es lógico que van a comprar en donde les resulte más barato.
De modo que la única opción que se tiene para solucionar el problema de la comercialización del ladrillo es que, sin excepción, todos los obrajeros se instalen en el Parque, lo cual es tarea de la autoridad. Así, el precio se uniformará y, por lo tanto, no habrá otras opciones.
?Mientras existan los obradores en la ciudad va a batallarse para la comercialización de lo que se produce en el Parque, lo que se busca es la economía?, glosa el también empresario.
Y enseguida hace una reflexión referente a que el Gobierno Municipal no es una oportunidad de trabajo para los constructores locales, ya que su obra la realiza por administración, es decir, utiliza sus propias herramientas. De allí que el sector constructor pocas veces tiene acceso a alguna acción del Ayuntamiento.
Esclarece que, lejos de lo que pudiera pensarse, la obra administrada no implica ahorros, ya que en realidad se utiliza toda la infraestructura de maquinaria y personal del Gobierno, lo cual se presta a fugas y, en ocasiones, sale más cara que darla a un contratista.
Insiste en que cuando la producción del ladrillo no estaba regulada, las quemas eran indiscriminadas y eso generaba un conflicto; por lo tanto, la intención de la autoridad municipal de solucionar este panorama es buena.
?Es loable la acción del Municipio pero se fueron demasiados lejos, no sabemos las negociaciones que se hicieron con los primeros locatarios. En esto ya se tomó la determinación en su momento. Esto implica más gastos de traslado?, refiere.
Desolación
En un recorrido que realizó este medio de comunicación se pudo constatar el panorama adverso que se vive en el Parque Industrial Ladrillero.
-Los pocos obrajeros que se han quedado en el lugar esperan que la situación mejore.
-Piden que todos los productores de ladrillo sean reubicados en ese sitio, a 28 kilómetros de la ciudad.
-Consideran que vender el ladrillo a un peso ya no es negocio.
-Muchos de los que en un principio decidieron irse para el Parque ya se han regresado a la mancha urbana.
FUENTE. Investigación de El Siglo de Durango.
