Nueva York, (EFE).- El Opus Dei no excluye que sus asociados demanden a Sony-Columbia tras intentar sin éxito que la productora suprimiera las alusiones a esa prelatura en la versión cinematográfica de "El Codigo Da Vinci".
Según el portavoz del Opus Dei en Nueva York, Marc Carroggio, las querellas se presentarán si el impacto de la película, cuyo estreno es el 19 de mayo, reduce la recaudación financiera para las obras de caridad del grupo religioso.
"Aunque habría motivos, no creo que el Opus Dei como tal emprenda acciones. Pero no puedo responder por nuestros asociados, que no me extrañaría que lo hicieran", dijo Carroggio a EFE.
"Muchas de nuestras iniciativas se sustentan en el apoyo de colaboradores, tanto personas como instituciones. Está claro que el film puede dificultar su recogida de fondos y no me sorprendería que pidieran indemnizaciones económicas", anotó.
Carroggio reconoció que el Opus Dei intentó que Sony-Columbia eliminara en la película toda referencia al grupo, que aparece como una secta diabólica en la novela de Dan Brown en que se basa la cinta y es un éxito de ventas en todo el mundo.
Tras divulgarse el proyecto cinematográfico, el vicario del Opus Dei en EEUU, Thomas Bohlin, escribió en enero del 2005 una misiva con esa petición a la presidenta de la productora, Amy Pascal, quien contestó con una carta que Carroggio calificó de "cortés pero vaga".
No es la primera vez que el Opus Dei, o sus asociados, estudian la posibilidad de emprender acciones legales para frenar el fenómeno creado en torno al grupo por El Codigo Da Vinci.
Traducida a cuarenta idiomas, la novela ha vendido 30 millones de ejemplares en todo el mundo, 12 millones de ellos sólo en los Estados Unidos, donde en paralelo al estreno del film se van a imprimir cinco millones mas.
El Opus Dei ya estudió la posibilidad de llevar a los tribunales El Codigo Da Vinci hace cuatro años -con la aparición del libro-, pero desistió tras consultar con sus abogados y comprobar, según Carroggio, que "la ficción está bien protegida".
Pese a que parece dejar abiertas todas las opciones, el grupo ha cambiado radicalmente su estrategia en este país tras conocer en diciembre último que Sony-Columbia había seguido adelante con su plan de realizar una película que se ajustara a la novela.