Reuters
LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- ¿Qué regalarle a una estrella que, aparentemente, lo tiene todo? ¿Quizá un sostén con diamantes incrustados a juego con un panty de 15 mil dólares? ¿O qué tal un martillo hecho a mano en oro de 22 quilates, con valor de dos mil 500 dólares?
Bueno, pues esos son sólo dos de los artículos que recibirán los nominados al Oscar de este año de parte de diversas compañías, que esperan con su ?generosidad? un tipo de publicidad que el dinero no puede comprar (un famoso usando determinado celular o una actriz luciendo equis bolso de mano).
Lo que comenzó en 1989 como un discreto agradecimiento de la Academia a sus presentadores, se ha convertido en una industria multimillonaria presente en casi todas las ceremonias de cine y música de Hollywood.
De hecho, ahora existen hasta los ?salones de regalo?, donde los nominados reciben los arcones y paquetes que distintas empresas les obsequian. Este año, por ejemplo, la compañía Distinctive Assets entregará hasta ?bolsas para perdedores?. Es decir, regalitos para los actores, actrices y directores que se queden sin su Oscar, que van desde tres días en una suite privada en Las Vegas, hasta una cajita de mentas.
Con respecto al juego de lencería de Victoria?s Secret, la compañía sabe que las actrices no van a lucirlo en la alfombra roja, pero es un mensaje a los posibles compradores de que esos productos son del gusto de las celebridades.
?Para nosotros es muy valioso tener a mujeres de alto perfil entre las fans de nuestra marca?, dijo Sara Tervo, portavoz de la compañía.
Y aunque algunos comentaristas han criticado el hecho de que se regalen tantas cosas lujosas a personalidades ricas, los involucrados establecen que no se trata de filantropía, sino de marketing.
?No hacemos algo peor que lo que hacen las cervecerías, al pagar un millón de dólares por un anuncio de 30 segundos en el Super Bowl?.