EL SIGLO DE TORREON
Un bebé es el regalo más hermoso que recibieron cuatro laguneros, a la víspera del Día del Padre. Ellos vivieron la experiencia maravillosa del nacimiento de sus hijitos.
Qué más preciado tesoro para la felicidad de un hogar que la llegada de un angelito y para conocer de cerca el sentir de estos orgullosos papás, acudimos a conocido sanatorio particular para platicar con ellos.
En la habitación 102 del hospital acompañaba a su esposa, Alejandra Zarragoicoechea, el feliz papá Carlos Alberto Rebollo Mendoza, quien con toda la ternura del mundo sostenía entre sus brazos a la pequeña Regina, que nació el 15 de junio a las 9:00 de la mañana.
Con un rostro colmado de dicha y una actitud de agradecimiento hacia Dios, dijo que es increíble ver lo que nace de una semillita. Presenciar el parto, para él fue una experiencia maravillosa:?Vi cómo nació la bebé, la manera en que los doctores la revisaron y pesaron; cuando salí del quirófano me entró un sentimiento encontrado, lloré de felicidad?.
Por otra parte, en el cuarto 105 se encontraba un papá muy joven: Alejandro Guerrero Rodríguez. Él no hacia otra cosa que contemplar a su primer bebé: ?Cuando nació Brayan Alexis sentí cosquillitas de emoción, voy a trabajar duro para darle lo mejor, mucho cariño, lo quiero mucho a él y a su mamita Cinthia Lizbeth?.
Un nuevo miembro llegó al hogar de Jesús Armando Rangel Martínez y su esposa Laura Jazmín, el nacimiento de su hija primogénita Laura Aurora se registró el 14 de junio pasado.
?Dicen que se parece a mí, le doy gracias a Dios que la bebé nació sana, estoy feliz y quiero decirle a mi esposa ?gracias? por la belleza que me dio, a las dos las amo?, comentó Jesús.
Es indudable que la llegada de un bebé se vive como uno de los acontecimientos más importantes en la vida, que trasforma las relaciones de pareja, generando mucha, pero mucha felicidad.
