Emigran a las ciudades del país y Estados Unidos 5,100 padres de familia en busca de oportunidades
PUEBLO NUEVO, DGO.- La industria forestal está paralizada en un 85 por ciento, debido a las intensas lluvias de temporada y a la terminación de permisos de extracción de madera correspondientes a la anualidad pasada, informó el productor Felipe Norberto Coria Quiñones.
En el municipio se estima la existencia de 250 empresas de pequeñas a grandes, de las cuales aproximadamente 100 terminaron sus contratos laborales de manera definitiva, es decir cerró el 40 por ciento, lo cual genera desempleo en la región serrana, lamenta el también ex Alcalde de Pueblo Nuevo.
Nunca antes se había visto esta situación; antes en esta misma temporada los obreros que dejaban de laborar en los aserraderos y fábricas se dedicaban al sector agropecuario. Hoy, muchos han emigrado a otras ciudades en busca de trabajo.
De esta manera, se observan dos problemas en la industria forestal de Pueblo Nuevo: el más lamentable es el cierre de empresas al dejar de ser rentables, por los altos costos de producción contra los bajos precios de la madera en el mercado nacional.
Este mismo problema se agrava al paso del tiempo con la introducción de madera de otros países como Chile, Brasil, Canadá y Estados Unidos, además de Asia, caso concreto de Felipinas, entre otros que ofrecen el producto a bajo precio, logrando la preferencia de los compradores, aun cuando son de menor calidad en comparación con la de Durango.
Otro de los problemas es que el 85 por ciento de la industria existente está sin laborar por la falta de volúmenes, pues en este tiempo, aunado a la presencia de las lluvias, se acaban los permisos; algunos ya tienen los del nuevo ciclo 2006-2007, pero no los pueden ejercer por las malas condiciones de los caminos y la dificultad de las maniobras de extracción de pinos.
Por lo tanto, de los seis mil trabajadores del ramo forestal, cinco mil 100 quedan sin empleo, obligando a esta gente a buscar nuevas alternativas en otros oficios en las ciudades del país y el extranjero. El problema es evidente.
La situación laboral se mejorará a finales de septiembre o principios de octubre, una vez que las lluvias permitan la extracción de madera en rollo, aunque el 40 por ciento ?reitera- no reactivará sus máquinas, ya que fueron superados por la competencia.
Coria Quiñones en fechas anteriores anunció un proyecto ambicioso para dar ocupación a un gran número de padres de familia, con lo cual se resolvería en gran parte el problema ya citado, pero por el momento se realizan los estudios, aunque ya se da por hecho en futuro no muy lejano.
Influyen lluvias y bajos volumenes
El desempleo en Santiago Papasquiaro y siete municipios más de la región Noroeste con vocación forestal es del 60 por ciento en una plantilla global estimada en ocho mil plazas.
El desempleo en la rama forestal se debe a las lluvias y la baja en el inventario de madera, reveló Eduardo Guerrero, presidente de la Unión de Ejidos Emiliano Zapata.
Comentó que la mayoría de los desempleados emigran a otros lugares, incluyendo a Estados Unidos, dadas las carencias de oportunidades en los municipios de Santiago Papasquiaro, Otáez, Topia, Canelas, Tepehuanes, San Dimas, Guanaceví y Tamazula.
Cada año autorizan en estos lugares permisos para extraer 600 mil metros cúbicos de madera en rollo, lo cual casi se agotó en estas fechas; esperan el visto bueno a la nueva anualidad para reactivar las fábricas o aserraderos en esos municipios.