Espectáculos Miss Universo 2025 Miss Universo Christian Nodal Julión Álvarez

Pasa Alejandro Fernández la noche con sus fans

Notimex

GOTTINGEN, ALE.- El cantante mexicano Alejandro Fernández se encuentra en esta ciudad, donde no sólo da ánimo a la Selección Mexicana de futbol, sino que también aprovecha para conocer sus alrededores y sobre todo su vida nocturna.

Al menos dejó huella de ello al visitar una de las discotecas más frecuentadas de esta ciudad, el famoso Savoy, donde cientos de jóvenes, y otros no tanto, se dan cita para dar rienda suelta a sus pasos de baile en sus tres pistas.

El intérprete tapatío llegó el pasado viernes a esta ciudad e incluso está alojado en el mismo hotel en el que se encuentra el seleccionado mexicano, lugar al que sólo es posible acceder si se cuenta con algún conocido hospedado.

Al día siguiente de su arribo no dudó en ir a ver uno de los entrenamientos de la escuadra tricolor para darle ánimo y obviamente el pasado domingo 11 estuvo presente en su primer partido contra Irán, aunque fue encapuchado como luchador, pero eso sí con mucha clase y estilo, pues iba con gafas oscuras.

Ayer miércoles Alejandro disfrutó de la ciudad de Gottingen y durante la tarde no perdió la oportunidad de disfrutar en uno de los bares de la localidad el partido celebrado entre Alemania y Polonia, que se llevó a cabo en la ciudad de Dortmand.

Ahí, contrario a lo que acostumbra en México, Alejandro Fernández convivió con todos los presentes y por supuesto complació a sus compatriotas mexicanos posando con ellos para la foto y dando autógrafos.

Fue en este lugar donde se topó con el pugilista lagunero Rubén ?Cloroformo? Padilla y su amigo Maurice Collier, quienes le hablaron de su próxima pelea por el título de ?Peso Medio? y que se llevará a cabo en Gómez Palacio, Durango, a finales de septiembre, contrra Erick Esquivel.

Obviamente en este sitio ?El Potrillo? estaba acompañado por su novia tapatía, Ayari Ayala, y no dudó en festejar alegremente con los alemanes el triunfo de su equipo sobre la Selección de Polonia.

Un poco más tarde, ya en la madrugada, Fernández arribó a una de las discotecas más visitadas en esta ciudad, Savoy, donde se dan cita jóvenes y los no tanto, para bailar en sus dos salones, en los que se puede disfrutar música diferente.

La entrada a este sitio no es restringida, pero sí bastante lenta o tardada debido a que hay que esperar a que algunos decidan irse para poder accesar.

Posteriormente hay que tomarse una fotografía que aparece en la tarjeta que dan al entrar y de esta forma se lleva un control de las bebidas, ya que al pedir automáticamente la anotan en esta especie de identificación.

En el primer piso del inmueble hay dos pistas, una al nivel de la entrada y la otra en la parte superior, en la que se escuha música netamente disco o lo más moderno en inglés y español, que va de Robbie Williams a Queen o Shakira, hasta alguno de los temas de reggaetón del momento.

Mientras que en el salón inferior se escucha música tecno y lucen algunos salones privados, uno de ellos con un enorme ventanal en el que se puede ver a quienes están en su interior.

Este es precisamente el sitio que eligió Alejandro Fernández para estar al lado de su amada y de paso convivir por un momento con el también cantante mexicano Lupillo Rivera.

En este lugar ?El Potrillo? se dejó querer y salió de su privado para bailar con Ayari, pero en el momento en que sintió que los mexicanos lo acosaban un poco decidió subir al primer nivel para sacar sus mejores pasos en un discreto rincón.

Sin embargo, ni ahí escapó del acoso de su gente, de esa que se dio cita en este lugar, así que optó por tomarse la foto con algunos de ellos y luego decidió ir a la zona donde se encontraban para comenzar a bailar de manera sensual al lado de Ayari para beneplácito de las chicas mexicanas que dispararon de inmediato sus cámaras para guardar la foto del recuerdo.

Posteriormente regresó a su privado del piso inferior, donde de igual forma complació a la gente que se acercó para tomarse la foto del recuerdo. Casi a las cinco de la mañana decidió que era hora de irse.

Pero al igual que los simples mortales, Fernández tuvo que hacer cola para pagar 60 euros en total, una cuenta que algunos consideran bastante baja, así que haga usted sus cuentas.

El caso es que por 60 euros bailó, bebió y escuchó las porras de sus seguidores que no cesaban de gritar ?Potrillo, Potrillo!?, y a los que les brindó unos sensuales pasos de baile.

Ya para irse, Alejandro únicamente pidió su Porsche negro al ?ballet parking?, subió a su amada y como a las 05:15 horas realizó la graciosa huida a su hotel para tomarse un merecido descanso.

Cuentan sus anécdotas

Al caminar por las calles de Gottingen los mexicanos tienen dos temas de conversación: la nostalgia por los tacos con salsa y la presencia del cantante Alejandro Fernández. Todos tienen una anécdota. Guadalupe, una jalisciense que no tiene boletos para los partidos del Mundial Alemania 2006 pero mucho entusiasmo por ver mexicanos, cuenta: ?Tengo unos amigos hospedados en el mismo hotel que la selección. Ellos me ayudaron a burlar la vigilancia para tomarme esta foto?. Y enseña orgullosa la imagen: ahí está abrazada del cantante.

Efraín, un antiguo directivo de futbol en primera división, también cuenta historias de Gottingen: ?Ahí estaba (Alejandro) ayer en el centro de la ciudad, divirtiéndose con los alemanes. Lo saludé y me firmó una autógrafo para mi esposa?.

En efecto, ahí estaba en un bar junto a la famosa escultura de ?La Niña de los Gansos?, que es el punto de reunión para los habitantes de esta pequeña ciudad.

Llegó en la tarde y a las 21:00 horas se integró a la euforia de los alemanes para mirar el partido de Alemania contra Polonia. Cuando la selección local anotó el gol del triunfo en el último minuto del partido, los alemanes estallaron en júbilo, se subieron a ?La Niña de los Gansos? y cantaron: ?A la final, a la final, vamos a la final en Berlín?. Entonces Alejandro Fernández se integró a la multitud con brincos y cánticos que lo hicieron parecer un alemán más.

Acompañado por Jorge Campos llegó a Gottingen desde el comienzo del mundial. Entonces declaró: ?Los veo animados, con la fe de que van a llegar muy lejos. Estoy aquí para echarles porras y convencerlos de que sí se puede?.

Él no fue el único mexicano que se unió a la fiesta alemana en el centro de la ciudad. Cientos de mexicanos con sombreros de charro y algunos hasta con jorongo de Saltillo gritaron en perfecto alemán los cánticos sajones. En correspondencia, los huéspedes cantaron ?Cielito lindo? y terminaron con un vaticinio: ?México y Alemania en la final?.

Las combinaciones de las llaves de FIFA para este mundial no permitirían que eso sucediera, ya que en todo caso se enfrentarían en semifinales. Pero a las dos de la mañana, con demasiada cebada fermentada dentro del cuerpo, los formulismos de FIFA importaban poco.

Fernández salió de la plaza muy cerca de la medianoche. En auto de lujo partió con rumbo desconocido. Al otro día, los mexicanos que se encontraban en las calles del centro tenían más anécdotas: ?Me tomé una foto con él y su novia. Estaba muy alegre, no traía guardaespaldas así es que uno se podía acercar para platicar?.

Leer más de Espectáculos

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Espectáculos

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 219568

elsiglo.mx