ZACATECAS Y SUS HOMBRES ILUSTRES
Don Francisco Goitia García, uno de los grandes pintores zacatecanos, nació en el rancho de Patillos de la Hacienda de Bañón, Zacs. El día cuatro de octubre de 1882, hijo de don Francisco Goitia Cabral y María García (fuera de matrimonio, pues él estaba casado con doña Elena Arellano). Sus abuelos paternos fueron don Francisco Bollain y Goitia y su segunda esposa doña María Cabral Dávila.
Yo comencé a recopilar datos sobre este gran pintor zacatecano desde 1955 y en la Revista Impacto del siete de mayo de ese año dice: ?Goitia, el genio humilde de México. Temen que les robe el paisaje y no me dejan pintar, declaró, azuzan contra mi los perros y me echan del pueblo, pero ese paisaje es justamente el que yo necesito. Por eso pido garantías, quiero acabar mi cuadro.
?Al escuchar la extraña petición, el alto funcionario tuvo un sobresalto. Miró a su interlocutor con cierta penetración en busca de un signo de desvarío. Pero la expresión de aquél hombre era, a la vez, tan humilde y señorial, su voz tan delicada y al mismo tiempo decidida, que no pudo dudar.
?Llamó a una secretaria y al instante dictó un oficio que más o menos decía esto: El portador es uno de los más distinguidos pintores mexicanos. En la actualidad está pintando una serie de cuadros cuyo tema es el paisaje de nuestra tierra. Suplicamos a las autoridades que le den toda clase de facilidades y garantías para el desempeño de su misión?.
Premio Nacional de Pintura. En la Revista de Revistas de fecha primero de mayo de 1959, el periodista Jaime Pericás escribió:
?Un arado, una bola de cristal, una petaca con un escorpión dentro y un esqueleto bailarín fueron las armas que esgrimió el laureado Francisco Goitia antes de tomar los pinceles. El venerable viejo de Xochimilco?, pueblo que en 1957 le confiriera el título de ?Hijo Predilecto?.
?... En Barcelona, España estudia bajo la tutela de Francisco Galli, quien fracasa en su intento de moldearlo al ?estilo europeo?. No obstante, lo anima y Goitia instala su primera exposición a base de una veintena de trabajos en tinta y acuarela, cosechando resonante éxito. Enterado el Gobierno de México, le envía una pensión que lo hará vivir desahogado dos años.
?Goitia sufre las inclemencias del Invierno parisiense en 1909. trabaja en un cafetín. Después pinta retratos a gente de la clase media. Por las mañanas visita cuanto museo, exposición y sitios de interés se ponen a su alcance...
?Ganador de la Primera Bienal Interamericana de Pintura y Grabado, con su notable Tata Jesucristo. Distribuyó así los 25 mil pesos que le reportó la distinción: Nueve mil pesos para cubrir parte del adeudo con el Instituto de Bellas Artes; nueve mil pesos para pagar una operación en los pulmones, a la que fue sometido hace cinco años; y los restantes siete mil pesos los entregó a su ayudante, como pago de los desvelos que le causó?.
El 26 de mayo de 1960 falleció en Xochimilco a los 78 años de edad, dejando a México un gran legado pictórico y un museo que lleva su nombre en Zacatecas, donde se albergan varias de sus pinturas...?.
