Destaca el Papa el sentido del trabajo para la realización del hombre y el desarrollo de la sociedad.
EFE
ROMA, ITALIA.- El Papa Benedicto XVI presidió ayer en la Basílica de San Pedro una misa por los trabajadores con motivo del día de su patrón, San José, en la que insistió en que el trabajo debe respetar la dignidad humana y servir ?al bien común?.
Ante cerca de siete mil trabajadores que llenaron la basílica vaticana, el Papa destacó ?la importancia primordial? del trabajo para la realización del hombre y el desarrollo de la sociedad.
Matizó, sin embargo, que es ?indispensable? que el hombre ?no se deje dominar por el trabajo, que no lo idolatre, ni pretenda encontrar en él el sentido último y definitivo de la vida?.
Recalcó la gran importancia del descanso, ya que ?al hombre, ligado a la necesidad del trabajo, el reposo le abre la perspectiva de una libertad más plena?.
El Pontífice pidió por los jóvenes ?que con dificultades logran entrar en el mundo laboral?, así como por ?los desempleados y los que sufren los problemas debido a la extendida crisis ocupacional?.
Subrayó que la realidad del mundo laboral sufre actualmente ?cambios rápidos y complejos?, al tiempo que insistió en que, en cualquier caso, el trabajo ?debe servir al bien de la humanidad, permitiendo al hombre cultivar y realizar su vocación?.
Benedicto XVI señaló que este año se celebra el quinto centenario del nacimiento de los Museos Vaticanos, que Juan Pablo II definió como ?una de las más importantes puertas de la Santa Sede abiertas al mundo?.
?Esta institución ofrece una importante contribución a la misión de la Iglesia, comunicando a millones de personas la verdad cristiana con el lenguaje del arte?, subrayó el Papa.