ENTREVISTA| SE REÚNEN ZAPATERO Y EL REY JUAN CARLOS PARA ANALIZAR EL NUEVO PANORAMA POLÍTICO
La organización terrorista habla por primera vez del "diálogo, la negociación y el acuerdo" con los gobiernos de España y Francia.
BILBAO, España (AP).-El grupo separatista vasco ETA pidió el jueves iniciar negociaciones de paz con España y Francia, les advirtió que no perdieran una oportunidad histórica para la paz y dijo que su alto al fuego "permanente" entrará en vigencia pasada la medianoche.
"Es el momento de tomar decisiones de calado, pasando de las palabras a los hechos", dijo ETA en un segundo comunicado entregado al diario vasco Gara y reproducido por la versión de internet del diario El País.
El grupo exhortó a los gobiernos de España y Francia a que "respondan de manera positiva a esta nueva situación" iniciada por su decisión de deponer las armas después de casi cuatro décadas de ataques con bombas y a tiros que costaron más de 800 vidas e hicieron de la ETA una de las últimas organizaciones armadas de Europa.
Varios pasajes del comunicado repitieron frases de la declaración del miércoles que anunció el alto el fuego permanente. Previamente el grupo había proclamado treguas para luego volver a la violencia.
José Antonio Ardanza, un ex presidente de la región vasca, expresó "cierto grado de confianza" en que este llamado fuera "el definitivo".
La ETA aparece gravemente debilitada por las detenciones de sus miembros en los últimos años, así como por la reacción generalizada contra los asesinatos políticos después de los atentados islámicos del 11 de marzo de 2004 en Madrid, que dejaron 191 muertos y más de mil 500 heridos.
ETA no ha realizado un atentado con víctimas fatales desde mayo de 2003.
En sus dos comunicados, el grupo dijo que el pueblo vasco tiene derecho a decidir su propio futuro, en alusión a su campaña por la autodeterminación para que los vascos decidan si quieren seguir siendo parte de España u obtener mayor autonomía.
Pero el documento del jueves habla por primera vez del "diálogo, la negociación y el acuerdo" con los gobiernos de España y Francia.
Se incluye a Francia porque la región vasca abarca provincias de ambos países que según ETA deberían formar parte de la patria vasca independiente.
"ETA hace un llamamiento a las autoridades de España y Francia para que respondan de manera positiva a esta nueva situación y para que no pongan obstáculos al proceso democrático", dice el comunicado.
El documento no aclara cuáles son los asuntos a negociar.
Se plantean ahora dos asuntos que el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero deberá resolver: qué hacer con los más de 800 presos de la ETA en las cárceles españolas y con los depósitos de armas del grupo.
Rodríguez Zapatero, que ofreció conversaciones de paz en mayo pasado si la ETA renunciaba a la violencia, ha dicho reiteradamente que no hará concesiones y sólo está dispuesto a negociar los términos de la rendición.
Después del anuncio de alto el fuego del miércoles, dijo que no había decidido si la declaración cumplía las condiciones para iniciar las conversaciones de paz.
El anuncio fue considerado una gran victoria política para el gobernante socialista, pero sus críticos mantuvieron una actitud intransigente y dijeron que bregarían para que el gobierno no hiciera demasiadas concesiones.
El líder del Partido Popular opositor, Mariano Rajoy, habló de "derrotar el terrorismo sin pagar precio", y sostuvo que el alto el fuego "es una pausa, no la renuncia a la actividad criminal", según El País.
Piden 'garantías' de paz
El Gobierno español exigió hoy a la banda terrorista ETA, que esta medianoche inicia un "alto el fuego permanente", que ofrezca "signos inequívocos" de su renuncia definitiva a la violencia para poder entablar un proceso de diálogo.
El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, reiteró que el Ejecutivo afrontará con "cautela" el anuncio de ETA y que solicitará la autorización del Parlamento para dialogar con la banda armada si constata de manera fehaciente que se dan las condiciones.
Zapatero se entrevistó en las ultimas horas con el rey Juan Carlos en una reunión de "carácter extraordinario" para intercambiar impresiones sobre las reacciones tras el anuncio de ETA y analizar el nuevo panorama político, informaron fuentes de la Casa Real.
El jefe del Ejecutivo insistió ayer en pedir "prudencia", tendió la mano al conservador Partido Popular (PP) para abordar juntos la situación y reiteró su compromiso de someter a la autorización del Parlamento cualquier iniciativa de negociación con ETA.