EL UNIVERSAL
Ginebra, Suiza.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) volverá a tener un director general asiático, la doctora china Margaret Chan, que ocupará ese cargo hasta el 30 de junio de 2012, según se decidió ayer y siempre que los 193 países de la agencia sanitaria de la ONU ratifiquen hoy su nombramiento.
?Tengo el compromiso, la pasión y la humildad para ponerme al servicio de todos los miembros de la organización y alcanzar muchos logros en pro de la salud mundial?, apuntó Chan al ser elegida, tras agradecer el apoyo con el que ha contado para convertirse en la séptima máxima responsable de la mayor agencia sanitaria del mundo.
Los 34 miembros del Consejo Ejecutivo de la OMS eligieron a Chan entre los cinco candidatos que habían llegado a la recta final del proceso de selección, entre ellos los responsables de Sanidad de México, Julio Frenk, y de España, Elena Salgado, quienes quedaron en segundo y cuarto lugar en las votaciones, respectivamente.
Tras la segunda ronda de votaciones, en la que Salgado fue eliminada con cuatro de los 34 votos del Consejo, casi todos los apoyos de España se desviaron a la candidata china, que pasó de contar con 11 a tener 15, frente a los diez que recabó el mexicano y a los nueve del japonés.
En la cuarta ronda, quedó eliminado el japonés y todos sus votos también se trasladaron a la candidatura china, lo que explica la amplia diferencia entre los votos de Chan (24) y los de Frenk (diez).
La hasta ahora subdirectora de la OMS para las enfermedades infecciosas será a partir del próximo enero la máxima responsable del ámbito técnico y administrativo de la agencia sanitaria de la ONU, en sustitución del surcoreano Lee Jong-wook, quien falleció repentinamente el pasado mayo a mitad de mandato.
El mandato de Chan irá concretamente del cuatro de enero de 2007 al 30 de junio de 2012, según decidió ayer el Consejo Ejecutivo de la OMS, lo que supone cinco años y medio, frente a los cinco habituales.
Su nombramiento y su contrato serán propuestos hoy a la Asamblea Mundial de la Salud, que se reúne en sesión extraordinaria en la sede europea de la Organización de las Naciones Unidas, también en Ginebra y que tendrá que aprobarlo por una mayoría de dos tercios.
