EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Cuando echaban gasolina con un garrafón a la camioneta en la que saldrían a una fiesta, uno de los dos jóvenes trató de encender un cigarro y provocó un flamazo que alcanzó la camisa del otro muchacho y le provocó quemaduras que ameritaron su hospitalización.
La Policía Ministerial informa que a las 22:00 horas ingresó al Hospital General de esta ciudad, Marco Antonio González González, de 14 años de edad, vecino del poblado Oriente Aguanaval, del municipio de Simón Bolívar, Durango.
De acuerdo al informe del personal médico del nosocomio, el jovencito presenta quemaduras de primer y segundo grado en el 35 por ciento de la superficie corporal, en cara, cuello, tórax, abdomen y brazo izquierdo.
Al llegar los ministeriales al hospital, se entrevistaron con María Dolores González Rodríguez, de 52 años, con domicilio en el mismo poblado, quien dijo que los hechos ocurrieron cerca de las ocho de la noche.
Dice María Dolores que ella se encontraba en su casa cuando llegó una vecina a decirle que su hijo Marco Antonio se había quemado afuera de su domicilio.
La mujer salió corriendo en busca de su hijo y con ayuda de otra persona lo llevó al Hospital General. En el trayecto Marco Antonio le explicó a su mamá cómo ocurrió el accidente.
El jovencito dice que se preparaban para el baile al que irían su primo y él en una camioneta y al estar echando gasolina, a su primo, de nombre Armando Rangel Favela, se le ocurrió prender un cigarro y de pronto se apareció el flamazo que le quemó la camisa y le fue imposible quitársela de inmediato.
El estado de salud del muchacho, se reporta como grave, según la información proporcionada por personal médico del Hospital General.
