El respaldo no llega; ofrecen calmantes, mientras el sector pecuario de Durango vive momentos agobiantes
EL SIGLO DE DURANGO
GUADALUPE VICTORIA, DGO.- Entre más postergan los apoyos, la ganadería como uno de los principal pilar de la economía se desmorona, afirma Lucio Ayala González, líder de los productores pecuarios del municipio.
Los aguajes están secos, los agostaderos agotados y las fronteras de Estados Unidos continúan cerradas a la exportación; son factores que mantienen literalmente abatidos a las 30 asociaciones del estado y productores independientes del sector social.
Se habla de mucho apoyo al sector primario, pero a la fecha no llega nada a los ganaderos de Durango para atenuar los impactos negativos de la sequía. ?Recientemente el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del Gobierno del Estado (SAGDR), José de Jesús Muñoz Ramos, hizo un ofrecimiento de seis millones de pesos; de acuerdo con el presupuesto promediado corresponderían 200 mil pesos por asociación y, de incluir a los productores independientes, se reduciría más el apoyo. Como ?gota de agua en un comal caliente?, no resolvería nada?.
Ayala González considera que una solución para la agobiante situación que vive la ganadería sería la liberación anticipada del subsidio federal proveniente del Programa de Estímulos a la Productividad Ganadera (Progan), pero de tardarlo como lo hicieron el año pasado sería fatal para muchos productores, sobre todo los más desprotegidos como son los ejidatarios.
Para tal efecto, las autoridades competentes tendrían que supervisar desde este momento las tecnologías recomendadas a los ganaderos, pues de esperar hasta octubre o noviembre sería catastrófico para la economía de muchos municipios que dependen directamente del sector pecuario. Dejarían solos a su suerte a los criadores, quienes no encuentran una salida factible a este grave problema.
DESPLOME DEL PRECIO
Como consecuencia al cierre de fronteras a la exportación, los ganaderos del estado han dejado de exportar 150 mil cabezas de becerros, por lo que se quedaron sin ganar 300 millones de pesos, equivalente a mil 500 por res.
Y mientras esto va en perjuicio de los ganaderos de Durango, los responsables del cierre de fronteras siguen tranquilos, señala Ayala González: ?ni productores, funcionarios ni veterinarios están en la cárcel por la irresponsabilidad de permitir la introducción de ganado enfermo de otros estados, aquí no pasa nada, a pesar de todo?.
En este caso se debe proceder conforme a la ley y de ser necesario hacer las reformas pertinentes para evitar que se siga dando el tráfico de ganado en Durango, pues las consecuencias son desastrosas para todo el sector, enfatizó.
A la fecha el impacto sigue afectando a los ganaderos, pues el precio cayó de 29 y 30 pesos en tiempos de exportación a 20 y 19 pesos el becerro de calidad; las reses las están pagando a seis pesos kilogramo en pie, se pierde más de una tercera parte del producto y tiende a la baja.
Dejan de exportar reses y el precio se desploma
Lucio Ayala González, presidente de la Asociación Ganadera de Guadalupe Victoria, señaló que tiene 285 socios y todos atraviesan por mal momento, pues este año han dejado de exportar seis mil 500 cabezas de bovinos a Estados Unidos.
Guadalupe Victoria tiene un inventario de 25 mil cabezas de ganado vacuno, se ubica entre la primera y segunda columna de la economía, misma que está en peligro de caer por la falta de apoyos oportunos para alimentar al ganado.
Los alimentos para ganado se elevaron exorbitantemente: la paca de alfalfa se cotiza a 70 pesos y la de avena a 45, cuando el año pasado se conseguían a 35 y 22 pesos, respectivamente; la harinolina vale tres mil 300 pesos la tonelada, antes la compraban a mil 700 pesos con 42 puntos de proteínas.
La situación es grave, las autoridades deben proceder a brindar el pronto apoyo para evitar males mayores en uno de los sectores más importantes de la economía del Durango, finalizó afirmando.
