EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- ?Mira Pedro, hay un hijo de su... que te quiere dar piso. Ni te imaginas quién es, por esto te digo, vamos arreglarnos?, dice por teléfono ?una voz chilanga?. Pedro atiende, pero nota que todo es mentira, sigue el juego a los ?sicarios? y después cuelga.
Es una táctica común de la extorsión telefónica, que en las últimas semanas ha estado a la alza en Torreón, lo que sugiere el inicio de ?temporada de caza?.
En los últimos 15 días se han registrado ocho intentos de extorsión telefónica, uno cada dos días, según la Dirección para la Investigación del Secuestro y el Crimen Organizado de Coahuila. (DGISCOE)
Pedro, quien grabó la conversación, sabe que la amenaza que recibió es falsa. ?La voz? aseguraba que tenía vigilancia afuera de su negocio en la zona centro, pero lo que no sabía ?la voz? era que meses atrás Pedro cambió de local pero siguió con su misma línea telefónica.
Pedro es uno de los cientos de elegidos por los estafadores telefónicos que al recibir un llamado amenazante a cambio de dinero, no dudan en acudir a las autoridades. En 2005, la DGISCOE atendió 150 casos similares, pero en ninguno se hizo el pago que demandaban los extorsionadores.
La promoción para alertar a la sociedad sobre los fraudes telefónicos permite que disminuya el número de afectados. Tan sólo una denuncia se ha presentado durante 2006, en la Procuraduría General de Justicia del Estado.
?Sí, es una denuncia, pero son cientos las personas que reciben una llamada y cuando les dicen que ganaron un premio, que un familiar está detenido o los amenazan, mejor cuelgan?, explica el jefe de la DGISCOE Enrique Ruiz Arévalo.
Pedro grabó la llamada telefónica como parte de su asesoría para contrarrestar a la banda de estafadores y las autoridades pudieron establecer ciertos patrones de conducta.
Durante su conversación, los extorsionadores aseguran que son secuestradores, asesinos y que ?de buena onda?, van a perdonar la vida y no molestarán a la familia, a cambio del pago de ?viáticos?, cantidad que está en el rango de los 300 mil pesos.
?¿Qué no entiendes?, te quieren matar, nos pagó para darte piso?, dice ?la voz?, que luego ofrece arreglarse con Pedro para parar la amenaza.