EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Tan sólo en Torreón, existen alrededor de diez mil 380 ciudadanos que presentan una discapacidad severa, además de cerca de 57 mil 700 que tienen una problemática de este tipo, pero que pueden aprender a valerse por sí mismos. Sin embargo, el cupo de la Unidad Compresora del DIF es de 85 personas, por lo que no se atiende ni al uno por ciento de la población con discapacidad.
?Necesitamos atender a más personas, rehabilitarles e integrarles a la vida productiva?, dice Rocío García Ortega, directora general del DIF, ?necesitamos aplicar el Reglamento?.
Un comité de padres de familia de las personas con discapacidad que reciben atención en el sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de la Unidad Compresora, se reunió con la directora para exponerle las inquietudes de sus hijos, que pudieran dejar de obtener los beneficios del programa tras un periodo de 14 meses, como lo establece el Reglamento Municipal de Asistencia Social.
Ángel Saldívar Salazar, padre de uno de los muchachos, señala que se acordó que se lleve a cabo una evaluación de cada uno de los casos para analizar las condiciones en que se encuentran las personas con discapacidad, a fin de establecer si requieren continuar en el programa del DIF.
Sin embargo, expone que 14 meses son insuficientes para una rehabilitación y menos aún para una integración de esta gente a la vida productiva: ?nunca va a ser suficiente, ni toda una vida, ellos dicen que hay personas que ya pueden ser dadas de alta porque pueden valerse por sí mismos, pero no es cierto?.
María Reyna Hernández, madre de un joven que juega basquetbol en silla de ruedas, reconoce la necesidad de que otras personas ingresen al centro de rehabilitación para que también sean atendidas, pero asegura que ?no pueden sacar a los que están, que metan a los que quieran pero no pueden sacarnos porque nos vamos a ver gravemente perjudicados?.
Por su parte, la directora del DIF afirma que es necesario que más gente con discapacidad pueda obtener los beneficios del programa, además de que se pretende también mejorar la calidad de los servicios que se prestan en la actualidad.
?Debe haber una corresponsabilidad de los padres de familia hacia sus hijos y hacia la institución, tenemos que establecer los mecanismos mediante los estudios socioeconómicos que ya se hicieron, los estudios médicos que se están empezando a hacer, los psicológicos?, comenta.
El comité de padres se mostró conforme con la apertura de la dirección, pues aseguran que el DIF no se había prestado al diálogo. No obstante, pedirán una audiencia con el alcalde, José Ángel Pérez Hernández, para tener la certeza de que el Ayuntamiento está enterado de la situación.
