EL SIGLO DE TORREÓN
SALTILLO, Coah.- El número de migrantes indocumentados muertos en su intento por internarse como ilegales en Estados Unidos se multiplicará una vez que se construya el muro entre la frontera de ese país con México, concluye un estudio del Instituto Nacional de Migración (INM).
El delegado del INM en Coahuila, Jesús López Macías, señaló que una vez levantada la barrera, los migrantes van a tratar de internarse a Estados Unidos por las zonas ?donde la barda tendrá menos kilómetros de longitud o donde simplemente no habrá barda?.
Esta desviación los llevará a enfrentarse a obstáculos naturales, desde el Río Bravo hasta el desierto, que aumentarían el peligro a sus vidas.
El estudio del INM estima que la mayoría de los migrantes intentará cruzar por rutas en estados como Chihuahua, donde sólo se construirán 25 kilómetros de muro.
En la frontera entre Coahuila y Texas se prevé que la barda tenga 100 kilómetros de longitud y 300 kilómetros en Tamaulipas. El presidente George W. Bush ya firmó la Ley autorizando los fondos pero aún se ignora cuándo iniciará su construcción.
Una vez levantado el muro, dijo López Macías, ?muchos connacionales o centroamericanos que pretenden internarse irregularmente en Estados Unidos van a preferir irse por otros lados?.
El funcionario se refirió a zonas donde el Gobierno estadounidense no planea levantar muro por la existencia de barreras naturales como el río o desiertos.
En algunos de estos puntos, detalló el funcionario, el Río Bravo es más profundo y peligroso y, aún cuando logren cruzarlo, los migrantes deben caminar largos tramos que por el desierto resulta mortal.
Cada año mueren más de 300 personas tratando de cruzar la frontera, sobre todo en el desierto de Sonora y Arizona. Este año 30 migrantes han muerto al tratar de cruzar el tramo entre Texas y Coahuila.
Detienen a 16 migrantes
16 indocumentados centroamericanos que se dirigían a la frontera con Estados Unidos fueron detenidos ayer en Torreón luego de que bajaron del tren de carga en que viajaban clandestinamente para pedir algo de comer.
Eran 14 hondureños, un guatemalteco y uno más cuyo lugar de origen se ignora, los que fueron descubiertos por empleados de Ferrocarriles Mexicanos en la antigua estación del ferrocarril en Prolongación Colón. Los empleados alertaron a la Policía Municipal, que detuvo a los migrantes.
15 hombres y una mujer, todos entre 20 y 26 años de edad, fueron trasladados a la estación migratoria del Palacio Federal donde recibieron alimento, abrigo y pudieron bañarse con agua caliente. En los próximos días serán repatriados a sus países de origen. (Por Luis Morales)