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WASHINGTON, EU.- El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, prometió ayer ?completar la labor? en las zonas de la costa del Golfo de México afectadas por el huracán Katrina, al cumplirse un año del devastador desastre natural.
?Nos quedaremos hasta que la labor esté completada y, trabajando juntos, ayudaremos a nuestros ciudadanos a lo largo de la costa del Golfo a escribir un nuevo futuro de esperanza, justicia y oportunidad para todos?, apuntó Bush en su discurso de radio de los sábados.
El 29 de agosto se recordará con diversos actos el primer aniversario del huracán Katrina en la costa del Golfo, que dejó más de mil 800 muertos y miles de millones de dólares en pérdidas. El mandatario estadounidense enfrenta las críticas de los demócratas y diversos grupos que han denunciado un despilfarro de fondos, así como las necesidades que siguen enfrentando los damnificados.
Un reporte de los demócratas señaló que 70 por ciento de los contratos valorados en diez mil 600 millones de dólares para reconstrucción y ayuda tras el huracán Katrina, fueron otorgados por el Gobierno Federal sin licitación ni competencia.
Ha habido poca planificación y una pobre supervisión para los contratos. Un total de 19 contratos valorados en ocho mil 750 millones de dólares experimentaron un creciente malgasto, fraude, abuso o mala administración, según el estudio.
EN EL DESAMPARO
Otro informe de la Liga Nacional Urbana indicó que a un año de la devastación causada en Nueva Orleans por Katrina, miles de sus habitantes siguen sin casa ni empleo.
Bush reconoció que Katrina reveló que los gobiernos federal, estatal y local no estaban preparados para responder a un desastre tan extraordinario.
Agregó que las inundaciones ?pusieron al descubierto una pobreza arraigada que ha aislado a las personas de las oportunidades de nuestro país?.
En su discurso indicó que el año pasado juró que el Gobierno Federal aprendería las lecciones de Katrina y permanecería el tiempo necesario para ayudar a las víctimas.
?Fue el mismo juramento que le repetí a Rocky (Vaccarella) durante su visita a la Casa Blanca. Este juramento significa diques más sólidos y hogares reconstruidos y nueva infraestructura?, dijo al referirse a su reunión esta semana con uno de los sobrevivientes.
Ese juramento ?también significa calles seguras, barrios llenos de negocios de propiedad local, y más oportunidades para todos?, señaló.
Bush indicó que con su esposa Laura volverá la próxima semana Mississippi y a Nueva Orleans para reunirse con ciudadanos y funcionarios locales.
Indicó que el Gobierno Federal ha realizado un estudio exhaustivo de su respuesta a desastres naturales y que con la ayuda del Congreso se han asignado 110 mil millones de dólares al esfuerzo de recuperación.
