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Nueva York.- ¿Quién dice que no se puede adelgazar comiendo sólo comida chatarra?. El nutriólogo Stephen Sinatra ofrece en su nuevo libro una dieta basada en este tipo de alimentación para perder hasta siete kilos en seis semanas.
Sinatra revela en "The Fast Food Diet", que saldrá a la venta en las próximas semanas, que la clave para adelgazar comiendo en establecimientos de "comida rápida" está en saber elegir lo que pedir y combinar lo que se ofrece en cada menú.
"Tiene que haber alguna solución al alcance de los 80 ó 90 millones de personas que comen comida chatarra cada día", indicó el también psicoterapeuta y cardiólogo, autor del libro junto a James Punkre.
En su primer capítulo escribe: "Si te consideras un adicto, o simplemente no puedes imaginar tu vida sin McDonald's, Pizza Hut o Taco Bell, este libro tiene buenas noticias para ti".
Según datos oficiales, en Estados Unidos el 65 por ciento de la población padece sobrepeso u obesidad. Los expertos advierten que si la tendencia actual no se detiene, la obesidad será en breve la primera causa de muerte prevenible del país, por delante del tabaco.
"Nosotros no tratamos de condenar este tipo de comida. Por el contrario, queremos que la gente vaya a estos restaurantes y escojan aquello que no les haga daño", indicó el doctor.
"Idealmente, todos deberíamos comer productos orgánicos, pero esto no va a ocurrir nunca en este país", añadió para justificar su dieta.
Según la dieta, en seis semanas se pueden perder entre 4.5 y 7 kilogramos, e incluso más si se completa con una tabla de ejercicios.
Sinatra fija un límite de mil 500 calorías al día para las mujeres y de mil 800 para los hombres.
Los productos totalmente prohibidos en esta dieta son las patatas fritas, las sodas, el queso y, sobre todo, los populares "McNuggets", o trozos de pollo rebozados.
También advierte que no siempre las ensaladas que ofrecen estos locales son inofensivas. Por ejemplo, la ensalada de McDonald's con salsa tipo "ranch" tiene casi las mismas calorías que una "cheeseburguer".
Un ejemplo típico de dieta diaria de su libro es el siguiente: desayunar en un "McMuffin" de huevo, tomar un yogurt a media mañana, comer un sandwich de pollo asado a la parrilla en Kentucky Fried Chicken.
A media tarde recomienda dos rebanadas de pan (bagel) untadas con queso en crema y para cenar un plato de salmón y ensalada en Olive Grarden, cadena estadounidense de comida rápida. En total, se habrán consumido mil 840 calorías y 55 gramos de grasa.
Pero la teoría de Sinatra no es nueva. Hace justo un año, Merab Morgan, de 35 años, decidió empezar una "dieta McDonald's" que se basaba en comer durante 90 días sólo en establecimientos de la popular cadena de hamburgueserías.
A los 70 días ya había perdido 17 kilos de peso. La idea le vino tras ver el exitoso documental "Super Size Me" en el que Morgan Spurlock registró, cámara al hombro, el grave deterioro físico que sufrió tras comer tres veces al día durante un mes sólo productos McDonald's.
Desde varias asociaciones de nutriólogos del país advirtieron que si bien la dieta de Morgan es ingeniosa, no es equilibrada, sospechando que ésta no aporta todos los nutrientes necesarios para que sea saludable a largo plazo, como minerales, fibra y vitaminas.
Por su parte, Jared Fogle, un estudiante de Indiana, perdió 110 kilos comiendo sólo los sandwiches -vegetarianos y de pavo- que ofrece la cadena Subway durante todo un año.
