EL ORO, DGO.- Los únicos beneficiados este año en el sector agropecuario han sido los productores y comercializadores de forrajes, ya que debido a la escasez de pastizales que ocasionó la sequía los precios de los alimentos para ganado se dispararon.
Martín Terrazas López, productor pecuario de Santa María del Oro, comentó que en los agostaderos ya no hay pastizales y que las lluvias aún no se presentan de manera regular para estimular el crecimiento de éstos, por lo que muchos ganaderos tienen que comprar el alimento para sus animales.
En las tiendas y bodegas especializadas en la venta de forrajes la paca de alfalfa se compra en 70 pesos, mientras que la de avena oscila entre los 45 y 50 pesos, situación que afecta a grandes y pequeños productores, guardando las debidas proporciones.
El productor de Santa María del Oro manifestó que cuenta con un hato de 500 cabezas de ganado, lo que le convierte en uno de los productores más prominentes de la región, quien dice que a pesar de tener un importante respaldo producto del trabajo de muchos años, ha sido afectado por las secuelas de la sequía.
Comentó que con algunos esfuerzos extras en primera instancia rentó algunos potreros para que pastaran sus vacas y ahora cuando las reses ya no tienen qué comer en los agostaderos, hay que comprar el alimento y balancearlo con suplementos.
Terrazas López argumentó que el ganado que maneja es de buena calidad, motivo por el cual le ha sido posible comercializarlo a buen precio en la región, afectándole muy poco el cierre de fronteras para la exportación de becerros de Durango.
Añadió que la cantidad de cabezas de ganado que ahora tiene es el resultado de años de trabajo y en algún tiempo hasta de precariedad, por lo que le resulta importante planificar las estrategias que le permitan conservar la cantidad y calidad de su hato.
Esperan las lluvias
Martín Terrazas López, productor pecuario de Santa María del Oro, mencionó que al igual que todos los productores agropecuarios de la región, espera la llegada de lluvias ya que hasta el momentos solamente se han presentado algunas precipitaciones pluviales aisladas que no compensan la sequedad de la tierra.
El ganadero indicó que en la región Norte del estado la agricultura tuvo fuertes pérdidas en la producción forrajera, debido a la falta de precipitaciones pluviales, situación que propició el alza en los precios de la pastura.
