No hay fecha definidida para el proyecto, que busca mostrar a las actuales y futuras generaciones los vestigios de la civilización grecorromana.
EFE
Alejandría (Egipto).- Las autoridades arqueológicas de Egipto estudian construir un museo submarino en la costa mediterránea de la ciudad de Alejandría para mostrar piezas sumergidas, en su mayoría de palacios, templos y avenidas de la época grecorromana, de aquella mítica urbe de la antigüedad.
El experto egipcio más prestigioso en arqueología sumergida, Ibrahim Daruich, explicó que el estudio del proyecto es llevado a cabo por expertos nacionales y extranjeros a través de varias comisiones.
Una vez concluidos los estudios, la ejecución del plan será propuesto a compañías extranjeras especializadas.
Sin embargo, todavía no hay fechas definidas para el proyecto, ni tampoco ha quedado claro cuál será el modelo de financiación del futuro museo.
A principios del pasado julio, expertos egipcios y extranjeros se reunieron en Alejandría y debatieron esta original iniciativa, que cuenta con algunos ejemplos parecidos en el mundo mediterráneo.
"En ese seminario, todos convenimos la necesidad de construir el museo en la zona costera donde se encuentra la Biblioteca de Alejandría, para mostrar a las actuales y futuras generaciones los vestigios de la civilización grecorromana", indicó Daruich.
Subrayó que las comisiones estudiarán el grado de visibilidad, contaminación, los sedimentos y la intensidad de las corrientes marinas en la zona donde se proyecta erigir el museo.
"Entre las ruinas arqueológicas sumergidas más importantes destacan varios palacios, entre ellos el de las Meditaciones, el Marco Antonio y el de Cleopatra, destruidos todos ellos por los terremotos que sacudieron la región sucesivamente en los siglos IV, VII y XIV", recordó el experto.
Tras la puesta en marcha del proyecto museístico, se ha suspendido la extracción de las enormes piezas que quedaron en el fondo del mar y ahora sólo son recuperadas pequeños objetos como monedas y vasijas.
"Entre 1994 y 2002 hemos sacado del mar más de 600 antig~edades, cifra que sólo representa un dos por ciento de los vestigios de las 35 ciudades que el geógrafo griego Estrabón registró en el mapa que hizo de la zona, cuando visitó Egipto el año 450 a.C.", señaló Daruich.
Destacó que de esas ciudades hasta ahora sólo han sido descubiertas tres: Minutis, Canop y Heraklion, además del barrio de la realeza de la dinastía Ptolomea.
Esas localidades fueron fundadas hace más de 2,400 años como puertos comerciales y puntos avanzados para proteger al país de los ataques foráneos.
Algunos arqueólogos egipcios no ven con buenos ojos la idea del museo submarino, como es el caso del ex decano de la Facultad de Arqueología de la Universidad de El Cairo, Ali Raduan, quien apunta razones de orden práctico.
"Esos lugares están esparcidos en un radio de más de 30 kilómetros", recalcó Raduan.
Asimismo, el arqueólogo advirtió de los cuantiosos gastos financieros que requerirá tanto la construcción como el mantenimiento del museo, y de los riesgos que supone la zona donde se planea ubicarlo bien por los remolinos y corrientes marinas, bien por hallarse dentro de un área sísmica.
"Debido a todo ello, yo propongo que los turistas visiten esa zona arqueológica en pequeños batiscafos, a través de cuyos cristales se podrían contemplar las maravillas submarinas y que zarparían desde un museo que ha de construirse en la costa, y que sirva para exhibir las piezas pequeñas", concluyó Raduan.