Los firmantes de la esquela -una familia de la localidad de Weyam- piden a los alemanes que envíen "cartas de protesta" porque las autoridades permitieron la muerte del oso.
Berlín, (EFE).- Un diario bávaro publica una esquela del oso pardo Bruno, que mantuvo cinco semanas en jaque a granjeros y cazadores entre la frontera de Alemania y Austria y que fue abatido.
"Nuestro oso Bruno ha muerto", indica la esquela, de 13.5 centímetros de ancho y nueve centímetros de alto.
"Bruno recibió un disparo por la espalda en Spitzingsee y con él murió nuestra creencia de que nuestros políticos tenían corazón por los animales", sostiene la esquela.
En vez de coronas y flores, los firmantes de la esquela -una familia de la localidad de Weyam- piden a los alemanes que envíen "cartas de protestas y correos electrónicos" al presidente de Baviera, Edmund Stoiber, y al ministro bávaro de Medio Ambiente, Werner Schnappauf.
Tres cazadores bávaros abatieron al oso pardo Bruno en la zona de Miesbach, próxima al lago de Spitzingsee, a una distancia de 150 metros con una escopeta de caza mayor.
"JJ1", como se llamaba oficialmente el oso procedente del norte de Italia, "murió en el acto y no sufrió", según el ministerio bávaro de Medio Ambiente, que justificó su muerte porque suponía "una amenaza para los excursionistas" de la zona.
El animal había deambulado durante cinco semanas por la región fronteriza entre Alemania y Austria en medio de un gran debate público sobre la necesidad de matarlo o de dejarlo vivir, a riesgo de que continuara matando ovejas y otros animales domésticos o de que pudiera atacar a alguna persona.
Tras su muerte, Bruno será sometido a un análisis genético para confirmar su identidad y será disecado para ser después expuesto en el museo "Hombre y Naturaleza" de Munich.
La popularidad del oso Bruno le convertirá, después de muerto, en compañero de gloria cinematográfica de los inolvidables oso Yogi, Winnie the Pooh, Jackie y Nuca y el protagonista del filme "El oso" de Jean Jacques Annaud.
La productora bávara Wasabi Film anunció ayer que el director Corbinian Lippl (Ein Samstag dauert 90 Minuten) y la guionista Karin Michalke trabajan en el guión de un filme sobre Bruno.
Ambos tienen intención de inmortalizar en el cine las aventuras y desventuras de Bruno, su persecución, sus apariciones y escapadas, que fue tema en los informativos de televisión, llenó espacios en los periódicos locales y de tirada nacional y hasta sus seguidores abrieron una página web que, desde ayer, luce un crespón negro.
En sus excursiones por la zona fronteriza de Austria y Alemania, Bruno mató a un total de 35 ovejas, se comió a un buen número de aves domésticas de corral y destrozó varias colmenas, antes de que un disparo certero acabara con su aventura.
