San Francisco (EU), (EFE).- Haber pasado un año en Irak, ser la madre de una joven embarazada asesinada por su marido o haberse casado con un homicida convicto son ejemplos de que, para escribir un libro en EU, cualquier excusa es válida.
La excusa número uno, por supuesto, es ser famoso, sin más, una condición que permite vender libros (o bolsos, perfumes o una línea de maquillaje) como rosquillas.
Véase el caso de Paris Hilton, la descocada heredera del imperio hotelero del mismo apellido cuyo libro de título traducible como "Confesiones de una heredera", en realidad poco más que un catálogo fotográfico a todo color donde Hilton luce su palmito, está disponible en las principales librerías estadounidenses.
El volumen tiene su réplica, aunque modesta.
Se trata de un conciso documento titulado "Paris Hilton es una idiota", de lectura recomendada para quienes se pregunten por qué esta mujer demasiado rubia y demasiado huesuda ha cosechado semejante éxito.
Otros aprovechan el tirón de su nombre -y de su dinero- para dar consejos sobre lo más variopinto.
Este es el caso de Martha Stewart, la "reina del hogar" estadounidense, que quizá aprovechó el tiempo entre rejas y el posterior arresto domiciliario al que fue sometida por mentir sobre la venta de unas acciones para escribir su último libro, "Las reglas de Martha: Diez consejos para tener éxito cuando lanzas o manejas un negocio".
Al lado de Stewart está el omnipresente Doctor Phil, quien ha extendido sus tentáculos desde su popular consultorio televisivo hasta las librerías con consejos sobre todo tipo de asuntos, desde cómo alcanzar el peso ideal (no es óbice, al parecer, que el propio autor sea un tanto rollizo) a cómo encontrar el amor de tu vida.
La literatura con todas las letras también cede espacio, y mucho, a los relatos de las personas que acompañaron a los verdaderos protagonistas y buscan sacar tajada de ello, como Tammi Menéndez y su libro "Decían que nunca lo conseguiríamos".
Menéndez es la esposa de Erik, uno de los dos hermanos que fueron condenados hace diez años a prisión de por vida por el asesinato de sus padres, en el estado de Florida.
A esta categoría también pertenece Sharon Rocha, la madre de Laci Peterson, una mujer asesinada por su marido (posteriormente sentenciado con la pena de muerte) cuando estaba embarazada de ocho meses, en las navidades del 2002, en un caso muy seguido por los medios de comunicación.
O Linda Carroll, que tiene en su haber ser la madre de Courtney Love, la cantante y mujer del líder de Nirvana, Kurt Cobain, una experiencia singular que cuenta en el libro "La hija de su madre".
Algo más sesudas son las memorias de Paul Bremer, ex hombre fuerte de Estados Unidos en Irak que aprovechó su experiencia en el país asiático para lanzar el volumen "Mi año en Irak"; o las disquisiciones del ex presidente Jimmy Carter con su volumen titulado "Nuestros valores en peligro".
Cualquier temática es, en fin, válida, como muestra Suzanne Hansen con "Las verdaderas aventuras de una niñera en Hollywood", o Kathryn Sansone en el libro "La sabiduría real de una madre de diez hijos".
Y quienes triunfaron en otros campos que nada tienen que ver con la escritura llenan ahora con sus volúmenes las estanterías de las librerías, desde Jack Welch, el ex presidente ejecutivo del gigante General Electric -que ocupa prácticamente una sección entera-, hasta el campeón de lucha libre Billy Graham.
En resumen, quien no haya escrito un libro en EU, aunque el contenido se reduzca a la lista de la compra, que tire la primera piedra.
