EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- Mayúscula fue su sorpresa pero más fue su enojo al ver que la fachada de su casa, que recién había pintado, se hallaba toda pintarrajeada por los jovenzuelos que viven en su colonia. Su impotencia que mayor cuando al dar aviso a las autoridades, éstas le dijeron que no podían hacer nada.
Para María Eugenia Ortiz García, vecina de la calla López Mateos, este problema no es nuevo, Desde hace tiempo las paredes externas de su casa, muestran las huellas del ?arte? callejero que acostumbran realizar los malvivientes que se dan cita en el céntrico sector.
El ?graffitismo?, es un grave problema que afecta a la ciudadanía y que se ha ido extendiendo por toda la mancha urbana, afectando tanto edificios privados como públicos, sin que hasta el momento las autoridades hayan podido frenar esta situación.
Los ?artistas? aprovechan la deficiente vigilancia policiaca para hacer de las suyas a cualquier hora del día y cada vez son más los inmuebles que lucen alguna pinta, sin importar que sean particulares o públicos, como así lo demuestran las oficinas del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), cuyas paredes exteriores recién fueron pintadas y ya muestran vestigios del vandalismo.
Durante un recorrido por diferentes puntos de este municipio, se pudo comprobar que los ?graffiteros? prácticamente han invadido a esta cabecera municipal, pues gran parte de las paredes, bardas, puertas, portones y hasta monumentos de héroes o personajes ilustres, han sido pintarrajeados.
Con esto evidencia que para estos pandilleros es todo un logro pintar su nombre en la fachada de algún edificio público o particular, ?marcando? así el territorio de sus bandas.
En este recorrido se pudo apreciar que un gran número de viviendas se encuentran afectadas por el ?graffiti?, tal parece que los vecinos ya se acostumbraron a vivir con estas pintas en las fachadas de su domicilio.
?Qué ganamos con pintar, si parece que lo hacen a propósito y no pasan unos días cuando de nuevo aparece la casa toda pintada, los policías nunca sorprenden a nadie. La verdad es que no vigilan. ¿Cómo es posible que rayen los edificios públicos y nadie sea detenido por esa falta??, dijo Jorge Macías Enríquez, vecino de la colonia La Vencedora.
Dulce María Hinojosa Beltrán, ama de casa, comentó que ?los policías no vigilan bien, la otra vez unos jóvenes estaban pintando una casa en pleno día, cuando les dije que no hicieran eso me contestaron con muchas groserías y por eso decidí hablarle a la Policía, pero de aquí a que me contestaron, luego me pidieron mi teléfono porque pensaron que era una broma.
Muchos edificios públicos como escuelas, las oficinas del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) y el DIF, se encuentran seriamente dañados por los ?graffitis?. Uno de los más afectados es el inmueble que ocupa Recaudación de Rentas del Estado y del Juzgado de Primera Instancia en Materia Civil, al igual que las bancas que están en las afueras de la Secundaria Federal número Dos y al menos dos monumentos que están en esta pequeña plaza.
Que paguen
Los sampetrinos coincidieron en señalar que las autoridades deben establecer mayor vigilancia para tratar de sorprender a estos infractores y así, obligarlos a que paguen por los daños ocasionados a las fincas, sean particulares o públicas.
?No se puede tolerar que se gaste dinero en repintar las paredes dañadas. También nuestros impuestos se utilizan para ello cuando se trata de edificios públicos. Se debe obligar a que reparen los perjuicios ocasionados?.