EFE
BERLÍN, ALEMANIA.- El Papa Benedicto XVI llegó a su ?patria chica?, Baviera, bajo un sol radiante y entre muestras de júbilo de sus compatriotas y llamadas del presidente del país, Horst Koehler, a favor de avanzar en el ecumenismo.
Con la tradicional fórmula de saludo bávaro, ?Gruess Gott? - ?Dios os saluda? -, Joseph Ratzinger lanzó, desde el aeropuerto de Múnich, un primer mensaje a sus compatriotas, en la que es su segunda visita a Alemania, como Papa, y la primera a su Baviera natal.
Benedicto XVI apeló a la difusión de los valores cristianos y expresó su propósito de aprovechar ?mi visita al país donde nací? para alentar a los suyos hacia esa dirección.
Koehler, tras saludar a Joseph Ratzinger con un ?Bienvenido a su patria, bienvenido a Alemania?, pidió al Papa un ? impulso decidido al movimiento ecuménico? y recordó que ése, su país, fue la cuna de la reforma evangélica, 500 años atrás.
?Hay más cosas que nos unen que las que nos separan?, dijo Koehler, haciéndose eco así de las numerosas voces en Alemania que piden se avance en el ecumenismo.
El presidente, además de darle la bienvenida a su patria, recordó a todas las personas del mundo que se han visto obligados a dejar la suya, por guerras o persecución, y dijo que la palabra patria encierra mucho más que una mera definición territorial.
El Papa Ratzinger llegó al aeropuerto Franz Josef Strauss a bordo del Airbus A321de la compañía Alitalia, que aterrizó a las 13:22 GMT.
RECIBIMIENTO
El Pontífice fue recibido, a pie del avión, por el presidente Koehler y la canciller Ángela Merkel, así como el primer ministro bávaro, Edmund Stoiber, y escuchó ?sus tres? himnos, el del Vaticano, el de Alemania y el del Estado libre de Baviera.
Tras la ceremonia desde el aeropuerto, la comitiva de Benedicto XVI partió hacia la céntrica Marienplatz de Múnich, a la que llegó en su ?Papamóvil? y desde donde se dirigió a los ciudadanos. El Papa rezó ahí ante la Columna de la Virgen y mantuvo luego reuniones privadas tanto con Koehler como con Merkel, ambos de religión evangélica.
En los seis días de su visita recorrerá algunos lugares de su infancia y juventud, incluido el pueblo en que nació, Marktl am Inn, así como el santuario de Altotting y Ratisbona, en cuya universidad estudió y ejerció la docencia y donde vive su hermano mayor, Georg.
Joseph Ratzinger estuvo en agosto del año pasado en Alemania, con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud, en Colonia, y este es su cuarto viaje como Papa al extranjero, tras los realizados a Polonia y Valencia (España).