EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- Desde el mes de marzo, un grupo de internos del Centro de Readaptación Social (Cereso) está participando en las clases de teatro, serigrafía y literatura que les brinda la Casa de la Cultura del Municipio de Francisco I. Madero, al interior del penal el encargado de coordinar estos programas es el reo Aurelio Mora Vega alias ?El Yeyo?.
María Teresa Acosta Vera, directora de la Casa de Cultura maderense, informó que el Icocult Laguna (Instituto Coahuilense de la Cultura), está brindando todo su respaldo para que los internos del Cereso puedan tomar estos cursos que les ayudan en su rehabilitación.
El curso de teatro inició hace dos meses y se espera que en dos meses más los internos estén listos para preparar su primer obra durante un domingo para que las familias que visitan el penal puedan ser testigos del avance que tienen en la actuación.
El Icocult Laguna dio todas las facilidades para que el maestro colombiano Johan Uribe Jiménez, visite el penal una vez a la semana para impartir sus clases de literatura, el curso se desarrolla permitiendo que los 11 internos que se inscribieron lean un libro que posteriormente analizan y discuten en grupo.
Acosta Vera informó que en el curso de serigrafía participan 20 internos y en teatro otros 12, explicó que la idea de llevar estos cursos al penal surgió porque ahí están recluidos algunos maderenses y se intenta apoyarlos en su rehabilitación.
?Creemos que es conveniente ayudarlos a crecer emocionalmente como personas, estamos seguros que esto les sirve para su rehabilitación, porque saben que la sociedad está ayudando en su atención, porque es importante que aprendan alguna actividad y se preparen para que al salir sean personas de bien y no vuelvan a delinquir?, dijo la funcionaria.
Al interior del penal el encargado de coordinar a sus compañeros en estas actividades culturales y en las deportivas es Aurelio Mora Vega, un interno que purga desde hace ocho años una condena de 36 años, en este tiempo ha estado en los penales de Torreón, Monclova y ahora en San Pedro.
Mora Vega fue un torero profesional, participó en 243 corridas, 84 novilladas, en 18 ocasiones pisó la Plaza México y compartió el escenario con figuras como Eloy Cavazos y Alejandro Silveti, hace ocho años fue sentenciado por el homicidio de su esposa.
Ahora está dedicado a coordinar todas las actividades deportivas al interior del penal, y en cuanto se autorizaron los cursos de literatura, serigrafía y teatro, se ofreció para ayudar, incluso está interesado en escribir un libro sobre su vida y le pidió apoyo al maestro colombiano Johan Uribe Jiménez.
