Piers Sellers y Mike Fossum trabajaron en el espacio para instalar un módulo de bombeo para los sistemas ambientales de la estación.
Washington, (EFE).- Dos astronautas del transbordador Discovery abandonaron la nave para la segunda caminata de la misión de doce días de aprovisionamiento de la Estación Espacial Internacional que orbita a 395 kilómetros de la Tierra.
Piers Sellers y Mike Fossum trabajaron en el espacio para instalar un módulo de bombeo para los sistemas ambientales de la estación, y repararon una herramienta móvil que es crucial para el futuro de la construcción del complejo.
"Mira esa tierra allá abajo", dijo Sellers cuando abrió la compuerta y salió de la cámara de la Estación Espacial Internacional (EEI o ISS por sus siglas en inglés). "¡Oh, es tan hermosa!".
Las astronautas Lisa Nowak y Stephanie Wilson, a bordo del transbordador, estaban a cargo de la operación del brazo robótico del Discovery, que sirve como plataforma para que sus compañeros se aproximen a distintos puntos de la estructura espacial.
Mientras tanto, el ruso Pavel Vinogradov y el estadounidense Jeffrey Williams, que forman la tripulación de la EEI, continúan el trasiego de suministros desde el módulo Leonardo, ayudados por el alemán Thomas Reiter, que permanecerá seis meses en la estación.
Una vez que termine el traspaso de casi 2.7 toneladas de alimentos, agua, aire y otros suministros y equipos, comenzará la carga en el Leonardo de un volumen similar de desechos y experimentos científicos que se han acumulado en la EEI en los últimos tres meses.
Al término de la primera caminata de esta misión el sábado, la agencia espacial estadounidense NASA concluyó que el Discovery se encuentra en buenas condiciones para el retorno a la Tierra, después de que se separe de la EEI el próximo viernes.