SOMBRERETE, ZAC.- Daban perdidas sus cosechas de frijol por la sequía y la plaga, pero ayer resurgen las esperanzas en el campo agrícola con una precipitación pluvial que se mantuvo 12 horas de manera continua desde Fresnillo hasta Chalchihuites.
Tenían tiempo sin ver llover en la región, dice Jesús Paz Rodríguez Hernández, dirigente del Comité Municipal Campesino de la CNC de Sombrerete, que hace ocho días cayó una ligera llovizna, misma que se evaporó con las altas temperaturas, la tierra se mantenía seca.
Donde había brotes de planta de frijol también se observaba la presencia de la mosca ?el picudo?, la situación se tornaba difícil. Incluso las autoridades estatales estaban por solicitar a la Federación se declarara a Zacatecas como zona de desastre agrícola.
En Sombrerete se cuenta con 160 mil hectáreas laborables, el 70 por ciento de esa superficie es cultivada de frijol, el resto de maíz, trigo cebada y poco forraje, aquí avanza muy lento el programa de Reconversión Productiva.
Rodríguez Hernández recordó con tristeza que el año pasado perdieron sus cosechas por la plaga del gusano ?el soldado?, al cual siguen combatiendo con el respaldo de las autoridades estatales y federales, incluyendo a personal del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).
Inclusive se distribuyeron aspersoras por parte del Municipio a varios ejidos a fin de fumigar y eliminar el insecto que tanto daño a causado al campo de Sombrerete. Con las lluvias de esta semana se puede remediar en parte el problema.
De acuerdo a investigadores de INIFAP la tierra de Sombrerete requiere de un tratamiento especial a fin de evitar se desarrolle ?el soldado? y ?el picudo?, plagas que han diezmado la economía de los hombres del campo.
Tal vez, comenta el líder campesino, se requiere de una reconversión total de cultivos, pues siempre se ha sembrado los productos tradicionales como el frijol y maíz. De antemano indica que los forrajes no les inspiran confianza a los agricultores, debido al problema de la comercialización.
De complicarse la situación del campo, solicitarán apoyo de la Federación y Estado a través del Programa Empleo Temporal para todos los ejidos afectados, pues es difícil para quienes no tienen otra alternativa.
COMPLEMENTARIA
Se humedece la tierra
José Luis Valles Escobedo, coordinador de Protección Civil, comentó a El Siglo de Durango que las lluvias se presentaron a las 16:00 horas en la región norte de Zacatecas, según lo constató en un recorrido desde Fresnillo a Chalchihuites.
Las precipitaciones pluviales cesaron a las 04:00 horas de ayer, aún cuando después de unas horas volvieron las lloviznas, lo cual es alentador para el sector primario de varios municipios de Zacatecas.
Atribuyen estas lluvias al paso de la tormenta tropical ?Emilia? por la Cuenca del Pacífico durante estos días.
Trabajan con fe
A 13 kilómetros de la cabecera municipal de Sombrerete se encuentra el ejido Aquiles Serdán, donde Jesús Paz Rodríguez Hernández, dirigente campesino, trabaja la tierra, con la esperanza de poder rescatar algo de lo que tenían perdido por la falta de las lluvias.
Al igual que Jesús Paz, miles de productores de los 42 ejidos del municipio de Sombrerete tienen fe de que la situación se mejore, de lo contrario sería el segundo año consecutivo de pérdidas agrícolas, no es nuevo, pues la mayor parte de la superficie depende de las lluvias, sólo unos cuantos tienen pozos de riego.
Este año los productores agrícolas recibieron mil toneladas de semilla de frijol apta para el cultivo, de la variedad negro San Luis, a razón de 200 kilogramos por productor con un máximo de seis hectáreas, según datos proporcionados por el alcalde, Juan Quiroz García.
Dicho apoyo se otorga debido a los daños registrados en el ciclo 2005 debido a las plagas; también se distribuyeron 160 fumigadoras, cada una tiene un costo de 17 mil 500 pesos, de lo cual el 50 por ciento es aportación del Gobierno y el 50 por ciento restante de los productores.
Según estudios del INIFAP, dice el Alcalde que se fumigará contra la plaga de ?el soldado? durante la primera escarda que es cuando ataca el insecto. Hay confianza en salir adelante, afirman los campesinos.