Dejan las explosiones registradas cerca de las oficinas de la ONU a seis personas heridas.
EFE
BEIRUT, LÍBANO.- La explosión ayer de dos proyectiles en el centro de Beirut ha vuelto a rememorar la reciente crisis vivida en la capital libanesa, que todavía se recupera de la guerra no declarada librada los pasados julio y agosto entre Israel y la milicia libanesa de Jezbolá.
Según explicaron fuentes policiales, al menos seis personas resultaron heridas, aunque ninguna de ellas de gravedad, por la explosión de dos proyectiles en el centro de Beirut, en las inmediaciones de varios edificios gubernamentales y las oficinas de la ONU.
Un grupo de hombres armados, que la Policía no ha identificado hasta el momento, lanzó tres proyectiles anticarro contra la plaza Riad el Solh, en el centro de la capital libanesa.
Uno de los proyectiles estalló en el aire, el segundo lo hizo en el suelo y el tercero hizo blanco en un edificio que alberga un restaurante-discoteca.
El impacto de los proyectiles causó el pánico entre los transeúntes, numerosos a esa hora, añadieron las fuentes.
La plaza Riad el Solh, situada en el reconstruido centro de Beirut, está rodeada por la sede de la ONU y el palacio del Gobierno, ambos con gran protección policial y militar, indicaron las fuentes.
Este es el primer suceso de esta naturaleza ocurrido en el centro de Beirut, zona habitual de ocio de los turistas árabes y occidentales que volvieron al Líbano después de los enfrentamientos, entre Israel y Jezbolá.
Sin embargo, no es el primer incidente ocurrido en Beirut ya que, hace dos semanas, dos granadas impactaron en un cuartel de la Policía después que los agentes trataran de impedir la construcción de inmuebles ilegales en el sur de la capital, lo que degeneró en enfrentamientos que se cobraron la vida de dos personas y causaron heridas a decenas más.
El ministro interino de Interior, Ahmad Fatfat, afirmó ayer que lo sucedido busca provocar un conflicto interno en Líbano y apuntó a que los autores del ataque pueden ser los mismos que los que atacaron el cuartel de la Policía.
Fatfat explicó que los seis heridos fueron dados de alta del hospital en el que fueron ingresados y que los cuerpos de Seguridad del Estado prosiguen con la investigación de lo sucedido.
?Los que lanzaron estos proyectiles son los mismos que atacaron los cuarteles de la Policía. Existe un intento de provocar un conflicto interno en el país?, añadió el responsable libanés, que no quiso señalar a ningún grupo u organización hasta que concluya la investigación.
La tensión aumenta en Líbano después de los 34 días de combates entre Jezbolá e Israel debido a las diferencias que vuelven a aparecer entre los distintos grupos confesionales y políticos del país.
El primer ministro libanés, Fuad Siniora, advirtió que la tensión ?no permitirá solucionar los problemas ni mejorar la situación social y económica? de los ciudadanos, informó ayer el diario ?An Nahar?.
Siniora, que ha prometido pagar 53 mil dólares como compensación a las familias que perdieron su vivienda durante la guerra, recordó que ?se han acumulado varios asuntos pendientes durante los últimos 30 años a causa de las guerras, invasiones y ocupaciones?.
?La reciente guerra ha profundizado estos problemas, que no pueden ser resueltos mediante la tensión sino a través de una mesa redonda? entre los libaneses, añadió Siniora.