Agencias
México, DF.- Organizaciones civiles y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) congregaron ayer a miles de personas en una marcha pacífica por el centro de la capital mexicana, donde no pidieron explícitamente la abstención pero rechazaron la hegemonía de los partidos en política.
?Existe otro espacio, otro camino, otra forma de hacer política?, dijo el subcomandante Marcos en una de sus escasas intervenciones sobre el escenario colocado en el Zócalo, desde el que dio paso a distintos colectivos civiles que le acompañaron.
También demandaron la liberación de los civiles detenidos en San Salvador Atenco, el cese de la represión en su contra y la renuncia del presidente Vicente Fox, del gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto y de sus colaboradores Wilfrido Robledo (director de la Agencia de Seguridad Estatal) y del procurador Abel Villicaña.
La movilización, que aglutinó a cerca de cinco mil personas, partió del Ángel de la Independencia y llegó al Zócalo, en donde el llamado delegado Zero fungió como una suerte de maestro de ceremonias que dio paso a la lectura de varios manifiestos por parte de miembros de la sociedad civil.
Marcos utilizó metáforas para explicar que a la gente en el poder, a ?los de arriba?, no les importaban ?los de abajo? pero que desde hoy lunes tendrían un espacio en las organizaciones de izquierda como el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) para organizarse y buscar justicia y un nuevo orden social y económico.
La manifestación concluyó a las 15:00 horas. Marcos subió a su Voyager morada y abandonó el Zócalo.
