Denuncian tráfico de influencias del ex gerente de la paramunicipal Fernando Alatorre Dresel.
El Siglo de Torreón
SALTILLO, COAH.- Bajo una serie de ?argumentos políticos y no contables ni financieros?, la mayoría priista representada en el Congreso del Estado de Coahuila rechazó ayer aprobar las cuentas públicas de 2004 y 2005 del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento de Torreón.
La reacción de los legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) contrarió incluso al dictamen de la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública, que había avalado los estados financieros del organismo.
Si bien es cierto, los diputados del PAN, del Partido de la Revolución Democrática, Del Trabajo y de Unidad Democrática de Coahuila avalaron con su voto los estados financieros, no pudieron superar en número a los priistas, por lo que las cuentas públicas de los cuatro trimestres de 2004 y de los tres primeros trimestres de 2005 no se aprobaron.
La medida adoptada por los diputados del PRI tampoco coincidió con los resultados de las auditorías aplicadas por la Contaduría Mayor de Hacienda, donde no aparecieron irregularidades financieras ni administrativas en los estados contables del organismo operador del sistema de aguas en la ciudad de Torreón.
Las causas de no aprobar el dictamen de la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública, según el diputado Miguel Riquelme Solís, son: ?Por las denuncias interpuestas en la Procuraduría de Justicia del Estado contra la paramunicipal, por tráfico de influencias y asignaciones de obras a parientes de funcionarios municipales?.
Explicó Riquelme Solís que adicionalmente, se investigará en el cuarto trimestre de 2005, la manera como se autorizó el bono de marcha por 300 mil pesos, el ex gerente de la paramunicipal, Fernando Alatorre Dresel, lo cual se hizo sin consultarlo al Consejo Directivo.
?La cuenta pública también debe ser rechazada ante las evidencias de que se favoreció a la Constructora Berumen y que se incurrió en actos de nepotismo y de corrupción. Todos estos aspectos deben ser aclarados y por eso las cuentas públicas no se pueden aprobar?, argumentaron los legisladores priistas.
Riquelme Solís asegura que la empresa paramunicipal tiene 20 días hábiles para sustentar la falta de información a partir de que sea notificada del rechazo de sus finanzas. ?Será la Contaduría Mayor de Hacienda la que determinará el tiempo necesario para efectuar la auditoría y diligencias correspondientes, igualmente la nueva fecha para su eventual aprobación en el pleno?.
La semana entrante, la Comisión de Hacienda emitirá además un punto de acuerdo, para que la Contaduría Mayor de Hacienda que es el órgano técnico del Congreso del Estado, revise los procesos de asignación de las obras, las condiciones del endeudamiento en que quedó la paramunicipal luego del crédito por 70 millones que recibió de Banobras, dejando como garantía las participaciones municipales.
