Washington, (EFE).- A la mayoría de los que sufren cáncer de riñón se les extirpa el órgano entero, pero muchos podrían beneficiarse con una cirugía parcial que preserve el resto, según un estudio difundido por la Universidad de Michigan.
Cada año se registran en los Estados Unidos unos 30 mil casos nuevos de cáncer de riñón, un mal que causa anualmente la muerte de más de 10 mil personas en EU.
El cáncer de riñón afecta principalmente a los hombres y es más común entre las personas entre 50 y 70 años de edad.
El tratamiento quirúrgico más común para el cáncer de riñón es la nefrectomía total, esto es, la extirpación de todo el órgano afectado.
Los investigadores del Centro de Cáncer de la Universidad de Michigan, autores del estudio, señalan que muchos pacientes son candidatos para la nefrectomía parcial que sólo extrae el tumor y una pequeña cantidad del tejido sano.
"Este tipo de cirugía conduce a una mejor calidad de vida y una mejor conservación de las funciones renales a largo plazo", señaló el informe.
Los estudios han demostrado que para tumores de un tamaño menor a los cuatro centímetros, su extracción y de un pequeño margen de tejido sano es tan eficaz como la extracción total del riñón.
La preservación de la parte sana del riñón previene el deterioro de las funciones renales a largo plazo, lo cual es un factor importante para pacientes que padecen otras enfermedades que afectan a los riñones, como la diabetes y la hipertensión.
