El Estadio Azteca lució sus mejores galas. Miles de aficionados se dieron cita en el Coloso de Santa Ursula para estar presentes en la inauguración de la Copa del Mundo un día como hoy, 31 de mayo, pero de 1986. No cabía ni un alfiler, 105 mil gargantas gritaban el nombre de "México", un grito de esperanza, en el que también buscaban olvidar el dolor que significó la tragedia que azotó a la nació con el terremoto de 1985.
Se vivían momentos difíciles en el país, quizá por ello al instante en que el entonces primer mandatario de la nación, Miguel de la Madrid, dio por inaugurada la justa, se escuchó un silencio que después se convirtió en abucheo.
Había un miedo impresionante entre los organizadores; se pensaba que podía darse un acto terrorista. Para evitar cualquier contratiempo, el coso fue resguardado por 12 tanques ligeros, 50 mil elementos de seguridad, además de francotiradores que esperaban pacientes a que todo se llevara bajo una completa calma, y así fue.
Los tradicionales puestos móviles de tortas y tacos, fueron sustitutos por tiendas fijas dentro el inmueble, en el que se veían letreros inverosímiles como "Mister Taco", "Tako 86" o "Mister Gol", para estar acorde a la fiesta mundialista. La mayoría de los vendedores prefirió cambiar su comida tradicional por hot dogs, que alcanzaban precios estratosféricos de hasta 500 pesos.
Los cohetes se escucharon en el momento en que desfilaban los representantes de cada una de las selecciones, al mismo tiempo en que el sonido local mostraba fallas que impedían saber que escuadras se presentaban.
Mientras que en el terreno de juego se daban bailes encabezados por el Ballet Folclórico de la Universidad de Guadalajara, las miradas acapararon a una bella joven, que abandonó la zona de vestidores enfundada en el uniforme del tricolor, con el lábaro patrio en sus manos, y custodiada por cadetes del Heróico Colegio Militar y la Escuela Naval. Era tal el congestionamiento en los alrededores del estadio, que la selección de Bulgaria, cuyo partido ante Italia inauguró la justa, quedó atrapada durante 20 minutos, por lo que tuvo que ser desviada para poder llegar a tiempo.
Mientras Estados Unidos sufría por la explosión del transbordador Challenger, y gran parte de Asia temía por los estragos del accidente en la planta de Chernobyl, México albergaba la máxima fiesta del balompié mundial.
Aunque las apuestas se repartían entre varias selecciones, Argentina fue la escuadra que acaparó las miradas, y en especial Diego Armando Maradona que llegó en su mejor momento futbolístico. Brasil, Alemania, Italia y México, aparecían como las selecciones candidatas al título, pero el trabajo que realizó la albiceleste fue suficiente para que consiguiera la Copa del Mundo.
En la primera ronda, la escuadra de Carlos Salvador Bilardo venció a Bulgaria, a la República de Corea y empató con Italia. En octavos de final, le pegó a Uruguay; después, venció a Inglaterra un 22 de junio en la que se presentó la famosa "mano de Dios" de Diego, quien también logró uno de los tantos más hermosos en mundiales, llevándose a cualquier rival que se puso enfrente, hasta que venció el marco defendido por Peter Shilton.
Pasó sobre Bélgica, y en un dramático final, cuando vencían 2- 0, Alemania logró levantarse para igualar la pizarra, pero un tanto de Jorge Burruchaga a siete minutos de concluir el cotejo, le dio la corona a los sudamericanos.
La selección mexicana tuvo una destacada actuación. La afición, por todo lo que giró alrededor del Tri y en especial los problemas internos que se vivieron por los constantes permisos que daba el técnico Bora Milutinovic a Hugo Sánchez, se notó en los primeros encuentros frío, sin muchas ganas de respaldar al cuadro nacional.
Este malestar quedó de manifiesto durante el choque de la primera fase ante Paraguay, donde "el niño de oro" abandonó el coloso de Santa Ursula abucheado, tras fallar un penal: "Hugo buey, Hugo buey", fue el grito que retumbó en las tribunas. Sin embargo, el apoyo regresó tras su triunfo ante Bélgica, mismo que llevó a la escuadra al primer lugar del grupo B, algo que no se esperaba, ya que el calendario estaba programado para que culminará en la segunda posición y, con esto, jugar todos sus partidos en el Estadio Azteca.
La pasión se desbordó en la segunda ronda con la victoria ante Bulgaria, al marcar Manuel Negrete uno de los mejores goles en la justa en toda su historia, pero la misma se apagó al caer en series de tiros penales con Alemania, una maldición que aún persigue al tricolor.
Resultados
Campeón: Argentina
Subcampeón: Alemania
3er Lugar: Francia
4to Lugar: Bélgica
Participación de México: Fue descalificado en cuartos de final ante la Republica Federal Alemana en penales.
Campeón de goleo: Gary Lineker (Inglaterra) 6 gol