El Gobierno levantó la prohibición de que los pasajeros embarquen equipajes de mano en los aviones.
EL UNIVERSAL-AEE
LONDRES, INGLATERRA.- El Gobierno británico disminuyó ayer de ?crítico? a ?grave? el nivel de alerta por amenaza terrorista en el Reino Unido al tiempo que también redujo los estrictos controles de seguridad en los aeropuertos.
Desde el pasado jueves, este país estaba en su máximo nivel de alerta después de que la Policía asegurase que había desmantelado un supuesto complot para atentar contra varios aviones transatlánticos en pleno vuelo.
Pese a la rebaja, recomendada ayer por el Centro Conjunto de Análisis y Terrorismo (JTAC, sus siglas en inglés), el ministro del Interior, John Reid, advirtió de que la amenaza de atentados es aún ?muy seria?, lo que significa que ?hay una gran probabilidad de que se produzca un intento de ataque en algún momento?.
?El público debe saber que puede haber otras personas por ahí sueltas que planeen un atentado contra el Reino Unido?, avisó en una rueda de prensa, e indicó que ?siguen en curso varias operaciones de los servicios de seguridad?.
Actualmente, la Policía interroga a 23 personas, todas de nacionalidad británica, en relación con un supuesto plan terrorista para hacer estallar en vuelo, supuestamente con explosivos líquidos, hasta diez aviones con rumbo Estados Unidos.
Según las nuevas leyes antiterroristas, las autoridades tienen 28 días desde el momento del arresto para interrogar a los sospechosos, mientras continúan los registros de domicilios en Londres, condado de Bukinghamshire (afueras de la capital) y Birmingham, centro de Inglaterra.
El pasado fin de semana la Policía registró un bosque en la localidad de High Wycombe (Buckighamshire) en busca de pruebas incriminatorias. Al rebajarse el nivel de alerta, el Gobierno también levantó la prohibición de que los pasajeros embarquen equipaje de mano en los aviones, si bien las autoridades aeroportuarias han señalado que, por razones prácticas, empezarán a aplicar la medida a partir de hoy en algunos aeropuertos.
En Heathrow, el mayor aeropuerto británico y el de mayor tránsito de Europa, se canceló ayer un 20 por ciento de los más de mil 200 vuelos previstos, mientras que en Gatwick la compañía British Airways canceló todos sus trayectos nacionales.