LAGUNA DE RELATOS
Oficio|Desde hace 40 años, Juan Manuel Muñiz Ornelas es panadero
EL SIGLO DE TORREÓN
Pudo ser agente de ventas pero prefirió el el ritual de encender el horno y amasar la harina
TORREÓN, COAH.- Juan Manuel creció entre el olor del pan. Su padre se desempeñaba como mozo en la panificadora Jalisco y ahí aprendió el oficio. En un tiempo intentó convertirse en agente de ventas o en obrero, pero al final prefirió el ritual diario de encender el horno y amasar la harina.
Desde hace 40 años, Juan Manuel Muñiz Ornelas se dedica al oficio de panadero. A sus 59 años de edad, se siente satisfecho por su trabajo y todo lo que sabe se lo enseñó a sus cuatro hijos, entre ellos Raúl, quien trabaja con él en la Central Panificadora.
?Mi padre era mozo de panadería cuando yo era un niño, era el que se encargaba de tener la panificadora Jalisco bien limpia, y yo tenía nueve años cuando me llevaba a trabajar con él y ahí comenzó todo?.
Dice que la pobreza en la que vivía de niño, no le permitió terminar la primaria, sólo llegó hasta el quinto grado. ?Tuve que entrar a trabajar porque éramos muy pobres, así nació mi gusto por la panadería?.
Hace tiempo, y luego de muchos esfuerzos, Juan Manuel logró terminar la primaria. Tuvo que combinar la harina con los cuadernos, pero no le importó el esfuerzo. Dice que sus cuatro hijos también son panaderos.
?Uno trabaja conmigo, y los otros en centros comerciales. Desde un principio les enseñé este oficio a mis hijos porque es uno de los más socorridos, les di la opción de que si no les gustaba el trabajo en la panadería, buscaran por otro lado, pero al menos ya sabían un oficio?.
El pan debe estar muy temprano en las tiendas de Torreón, por eso hay quienes deben trabajar de noche, pero Juan Manuel, luego de 40 años de trabajo, llega a las nueve de la mañana a la Central Panificadora, ?en mi casa me gusta hacer empanaditas y mis hijos dicen que cocino mejor que mi esposa, pero ella nada más se ríe?.
En un día, Juan Manuel elabora hasta mil 400 piezas de pan francés, ?yo le enseño a mis hijos a tenerle amor al trabajo, pero el oficio de panadero es como cualquier otro, así como los mecánicos saben desde lavar un fierro hasta arreglar motores, nosotros comenzamos limpiando las charolas hasta que el pan está bien cocido?.
En estos días en la Central Panificadora hay más trabajo que de costumbre, pues deberán elaborar cientos de roscas para el Día de Reyes. Juan Manuel considera que esta tradición no se ha perdido, ?lo que pasa es que hay más competencia y esto provoca que baje la producción, pero los mexicanos seguimos preservando nuestras tradiciones?.