EL UNIVERSAL-AEE
MONTERREY, NL.- La fiscal federal Verónica Palacios Espinosa, abandonó el hospital donde convalecía y fue trasladada por la Procuraduría General de la República (PGR) a las oficinas de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), en la Ciudad de México, bajo un fuerte operativo de seguridad.
La funcionaria sufrió un atentado el pasado domingo 23 de julio, junto a los hermanos Efraín, Roberto y Tomás López de la Cruz, quienes confesaron estar relacionados con el Cártel del Sinaloa.
En el atentado murió una persona, mientras que la fiscal federal y los tres hermanos López de la Cruz resultaron heridos.
Palacios Espinosa fue trasladada a un aeropuerto local, resguardada por elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI) y el grupo de élite de la Policía Estatal. La fiscal deberá rendir su declaración ante la SIEDO para aclarar su relación con los hermanos López de la Cruz.