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BAGDAD, IRAK.- Las autoridades iraquíes rescataron ayer a 17 rehenes que fueron secuestrados la víspera junto a otros 68 trabajadores de una fábrica, ubicada a unos diez kilómetros al norte de Bagdad, al terminar su jornada laboral.
Fuentes policiales indicaron que la liberación del grupo de rehenes se produjo durante una operación desarrollada en una granja al norte de la capital iraquí y afirmaron que redadas similares se realizaron para localizar al resto de los secuestrados, pero sin resultados.
Alrededor de 30 rehenes, entre ellos mujeres y niños, fueron liberados poco tiempo después de la captura, ocurrida cuando los trabajadores salían de la fábrica y un grupo armado les ordenó subir a varios camiones y los llevaron a la granja avícola.
Uno de los rehenes relató que separaron a sunnitas y shiitas, y que a los primeros les ordenaron irse, de acuerdo con reportes de la cadena qatarí Al Jazzera, conocidos en la capital iraquí.
Las operaciones continuarán en la zona hasta dar con los demás trabajadores del complejo industrial, una antigua planta militar, donde ahora se fabrican puertas, ventanas y tuberías de metal, dijeron las fuentes policiacas.
La liberación de los rehenes coincidió con el anuncio del Gobierno de Rusia de que continúa la búsqueda de sus cuatro diplomáticos secuestrados desde el pasado día tres de este mes en Bagdad.
Un vocero del Parlamento ruso informó que se están realizando las negociaciones para liberar a los empleados de su embajada, sobre cuyas vidas pesa la amenaza de muerte por parte del grupo extremista Consejo Mujaidin Ashura, que losmantiene cautivos.
Los esfuerzos por salvar la vida de los diplomáticos se intensificaron luego que la víspera el grupo -vinculado a la red Al Qaeda- dijo en una declaración que los ejecutaría al afirmar que había terminado el plazo que dio a Moscú para cumplir sus demandas.
Rechaza Senado de EU retiro de tropas
La mayoría republicana en el Congreso de Estados Unidos votó ayer en contra del retiro de tropas de Irak propuesto por senadores demócratas, al argumentar que ello significaría una rendición frente a la insurgencia.
?El retiro no es la opción. Rendirse no es la solución. Es muy tarde para cambiar de curso en Irak y empezar a dar por finalizado el compromiso abierto del presidente (George W. Bush)?, dijo el líder de los senadores republicanos, Bill Frist.
Aunque el dirigente demócrata Harry Reid acusó a los republicanos de no tener un plan para frenar la violencia en Irak y estabilizar la situación, el argumento pareció no convencer a muchos de sus correligionarios, que se sumaron a votar contra la propuesta.
Al final, la iniciativa que obligaría a la Administración Bush a retirar todas las tropas para julio de 2007 -presentada por los senadores demócratas Diane Feisntein y Carl Levin- fue derrotada por 86 votos en contra y apenas 13 a favor.
El voto demócrata reflejó el temor que prevalece en el sentido de que el tema de Irak podría convertirse en un lastre político de cara a las elecciones de noviembre próximo, en las que se renovara la mayoría de los escaños en las dos Cámaras.
