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MÉXICO, DF.- El Gobierno de Estados Unidos (EU) justificó la construcción del muro y consideró como una ofensa personal las comparaciones entre las propuestas de reforzar su política fronteriza y el Muro de Berlín.
?El Muro de Berlín fue construido para mantener confinado al pueblo, fue creado por un Gobierno autoritario. En total contraste nuestro Gobierno democráticamente electo ha propuesto métodos para proteger a sus propios ciudadanos y para aplicar nuestras leyes migratorias?, dijo el embajador de Estados Unidos en México, Antonio O. Garza.
A través de una carta difundida por la representación diplomática, Garza consideró que no existe derecho humano de ingresar a otro país violando sus leyes y consideró que esfuerzos más firmes por parte del Gobierno mexicano para crear empleos bien pagados para sus connacionales ayudarían a disuadir a muchos migrantes de realizar el cruce peligroso e ilegal a Estados Unidos.
?Nuestros agentes de la Patrulla Fronteriza trabajan en un ambiente increíblemente peligroso, en el que regularmente son blanco de ataques en su esfuerzo por proteger la frontera?, dijo el diplomático.
El embajador comentó que el año pasado se efectuaron 1.2 millones de detenciones por entrar ilegalmente al país en la frontera con México, en las que muchas de ellas estaban involucrados criminales violentos.
Antonio O. Garza dijo que la propuesta de Ley 4437 que sugiere un muro de dos mil millas en la frontera entre otras medidas, solamente busca reforzar y agregar barreras físicas en ciertos lugares y puntos urbanos donde exista razón para su construcción.
?Ni un solo ciudadano mexicano que ingrese a Estados Unidos respetando nuestras leyes se verá afectado? y agregó: ?no esperamos que México secunde cada medida de seguridad que tomemos, pero sí confiamos en que nuestros vecinos respeten nuestro derecho de tomar dichas medidas en nuestro propio territorio y que entiendan las diferencias que hacemos entre migración legal e ilegal?.
Garza consideró que la migración ilegal es una amenaza para su sistema de leyes y una afrenta para millones alrededor del mundo, incluyendo México, que siguen las reglas cuando sus ciudadanos buscan ir a EU.
