Dos vagabundos que se habían instalado en Las Alamedas ya fueron internados; uno más volvió con su familia
El Siglo de Durango
Luego de que El Siglo de Durango diera a conocer que algunos indigentes se estaban concentrando en Las Alamedas, lo que causaba molestia entre los transeúntes, el DIF Municipal notificó que ayer se procedió a retirar a tres de ellos: Manuel Sánchez Carrillo, José Antonio Estebané Gómez y Manuel Avitia Ramírez.
Los dos primeros aceptaron ingresar a un centro de rehabilitación y el tercero fue entregado en custodia a sus familiares pues no quiso recibir atención profesional para superar su alcoholismo.
También ayer por la mañana, se auxilió a Manuel Salvador Alemán Sarabia, de 64 años, originario de Gómez Palacio, que ingresó a una casa de Alcohólicos Anónimos.
La dependencia establece que originalmente tenían un padrón de 70 indigentes. Se ha logrado acercamiento con cada uno de ellos pues el trabajo data ya desde hace algunos meses atrás. A la fecha, afirma, 50 ya se han retirado de la calle.
Muchos de los vagabundos son oriundos de otras partes del estado o del país, por lo que una vez estabilizados los apoyan con el pasaje para que regresen con sus familias.
El objetivo es que para el inicio de la época invernal no haya indigentes pues los riesgos en su salud son mayores. En caso de que la persona lo quiera, le pueden dar alojamiento temporal en el Albergue Municipal.
Con el antecedente de que muchos de los mendigos sí tienen un hogar, el exhorto es a los familiares para que nos los dejen solos y se responsabilicen de su bienestar, que si bien es cierto son alcohólicos, los ayuden y los lleven a centros en donde puedan darles tratamiento, no dejarlos abandonados y caigan en estado de indigencia.
De las personas que fallecieron, detallan que ya eran adultos mayores que en un momento fueron acogidos por el DIF Municipal con el objetivo de que se recuperaran pero debido a su edad, entre 70 y 75 años, resultó imposible mejorar su estado de salud.
En este año, tres personas indigentes han muerto. Fueron recogidos por el DIF Municipal y aunque se les dio alimento, alojamiento, su estado de salud ya estaba muy deteriorado y fallecieron en el hospital.
El llamado de la dependencia de asistencia social es que las familias se hagan responsables de sus parientes y no los dejen en el olvido.
Conforme lo han constatado, en su mayoría, los vagabundos tienen una familia, casa y hasta trabajo pero a causa de su adicción al alcohol u otras sustancias se dedican a estar en la vía pública, incluso, durmiendo en bancas o en jardines.
Tan sólo un caso
En su edición del 31 de julio del año en curso, este medio de comunicación dio a conocer que en los terrenos de lo que se conoce como Ex Campo Deportivo, calles aledañas a la Plazuela Baca Ortiz, fue encontrado sin vida Enrique Estrada Gómez, de 70 años, que vivía en la colonia Lucio Cabañas pero se dedicaba a deambular por la vía pública.
Una llamada al teléfono de emergencia 066 alertó al grupo de homicidios de la Policía Ministerial, quienes se desplazaron a la privada Ex Campo Deportivo, donde lo encontraron en condición de indigente con cuatro heridas producidas por objeto punzocortante, en el tórax y abdomen.
El hoy occiso era de complexión delgada, pelo cano, barba y bigote descuidados, pelo largo y vestía camisa a cuadros de color azul, pantalón en mal estado y en sus manos traía una mochila de mezclilla en la que guardaba pedacería de alambre de cobre y fruta en mal estado.
