EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- En segunda instancia se está revisando el caso de una violación en agravio de una menor de edad, indígena, ocurrida hace un año, toda vez que el probable responsable fue liberado por falta de pruebas hace mes y medio.
Fue el diez de diciembre de 2005, cuando agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) atendieron un llamado de auxilio donde se reportaba un abuso sexual.
De la intervención policiaca fue detenido quien dijo llamarse Jorge Santana Ramírez, de 37 años, mismo que estuvo a punto de ser linchado por los vecinos del lugar donde ocurrieron los hechos.
Como se informó en su oportunidad, Octaviano Sánchez Sánchez, titular del Juzgado Primero del ramo penal, dictó la sentencia absolutoria a Santana Ramírez, entre otros puntos, por ?falta de pruebas periciales contundentes, contradicción en las declaraciones de la madre de la menor, e imprecisiones en el certificado médico?.
En su momento el inculpado fue señalado incluso por intoxicar a la menor de 12 años de edad y hacerle tocamientos en diferentes partes del cuerpo, además de presuntamente someterla mediante sexo oral.
Hace un año, la madre de la menor de origen mixteca, a señas informó a unos vecinos sobre el abuso sexual y estuvieron a punto de linchar al sujeto que finalmente fue entregado a la Policía.
Después de su consignación al Ministerio Público y su internamiento al Centro de Readaptación Social (Cereso) con cargos por violación, Sánchez Sánchez dictó la sentencia absolutoria que ya fue apelada por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y se trabajará para aportar más elementos sobre los hechos, toda vez que la detención fue en flagrancia.
